Santa Bárbara ajusta centros y plantilla para ser más eficiente
Santa Bárbara pretende elevar su productividad una media del 10% hasta 2012 con un plan de transformación que supondrá la integración de las plantas asturianas de Trubia y Oviedo, la reubicación de las de La Coruña y Palencia, y un ajuste de plantilla del 6%.
La dirección de la antigua empresa nacional Santa Bárbara pretende sanear la compañía para hacerla más eficiente. Su objetivo es mejorar la productividad de las fábricas una media del 10% mediante un plan de transformación para el periodo 2009-2012 que ya ha presentado a los sindicatos. Con esta mejora, los gestores quieren afianzar la cartera de contrataciones y lograr que el 40% de las horas directas de producción se dediquen a la exportación.
Este cambio en Santa Bárbara Sistemas (SBS), integrada en la actualidad en el grupo estadounidense General Dynamics, viene impulsado por la necesidad de rejuvenecer una plantilla de 1.700 personas con una media de 50 años, de reducir los gastos de estructura de forma generalizada y de acabar con los desequilibrios existentes entre las fábricas, con plantas con falta de actividad y otras, con exceso de carga de trabajo.
En el negocio de integración de sistemas, las medidas que propone la empresa pasan por la concentración de los dos centros de Asturias. Así, la idea es que las actividades de la fábrica de Oviedo se trasladen a Trubia. De esta forma, el nuevo centro integrado, con un total de 666 trabajadores al cierre de 2012, lograría aumentar un 12% su productividad, incrementaría su carga de trabajo en un 29% y conseguiría mejoras en la gestión de compras y en procesos. La fábrica se haría cargo, entre otros productos, de vehículos blindados (Pizarro, VEC, VCZ), de obuses, misiles y armas de calibres medios.
La empresa también quiere trasladar la actual planta de La Coruña a un nuevo emplazamiento dentro de su comunidad, para distribuir de manera más eficiente la maquinaria, centralizar la forja de armas, incorporar las actividades de mantenimiento y reparación de mecanismos de blindados y reforzar su capacidad de producción con máquinas procedentes de Oviedo. El centro gallego y el asturiano equilibrarán sus cargas de trabajo para que la subactividad sea mínima. Con estas medidas, el plan prevé que la factoría coruñesa gane un 14% de productividad y aumente su carga de trabajo hasta un 139%. La plantilla objetivo para 2012 es de 208 trabajadores en total.
Sevilla, por su parte, mejorará su productividad un 5% y elevará su carga de trabajo un 52%.
En el área de municiones, el centro que se reubicará será el de Palencia, con el fin de que la carga de trabajo sea un 14% superior y su actividad, un 11% más eficiente.
En esta línea de negocio, las fábricas con una situación menos favorable son las de Granada y, en especial, la de Murcia. En el caso de la andaluza, los responsables de SBS quieren que comparta procesos de producción con Palencia y ubicar en la factoría el centro de I+D de municiones. En Murcia, la situación se considera 'crítica' por la falta de rentabilidad de la nitrocelulosa. El objetivo de la empresa es abandonar la producción de productos que no aporten ingresos y buscar nuevos nichos de mercado.
Todos estos cambios supondrán un ajuste de plantilla del 6% en las fábricas, hasta los 1.508 trabajadores en 2012. El plan inversor, sin contar el coste de traslado de plantas, será de 24 millones de euros, de los que 4,9 millones serán para programas en marcha (LEO, Pizarro II, Spike, Obús) y 18,2 millones para reposición y modernización de inmovilizado.
Los sindicatos, contra la integración de plantas
Los sindicatos UGT y CC OO siguen considerando insatisfactorio el plan hasta 2012 presentado por Santa Bárbara, pese a los cambios introducidos por la dirección de la compañía respecto a una propuesta inicial.Así, desde UGT, el sindicato mayoritario, consideran 'insuficiente' el texto por tres razones básicas. En primer lugar, porque no ven justificada la integración de la planta de Oviedo con la de Trubia. A su juicio, la fábrica ovetense debe seguir siendo autónoma e independiente, con unas líneas de negocio propias, aprovechando la actual cualificación de la plantilla y su especialización en determinados productos.La segunda objeción a la propuesta del grupo tiene que ver con las medidas laborales defendidas para renovar y ajustar la plantilla. UGT cree que si sólo se recurre a bajas incentivadas, contratos de relevo y al reciclaje interno no se van a conseguir los objetivos marcados para rejuvenecer la edad media de los trabajadores. El sindicato aboga por impulsar, además, un plan de prejubilaciones y de nuevas contrataciones, similar al aplicado en otros sectores, como sucedió en el naval con el caso de Izar y su transformación en Navantia.La tercera gran reivindicación de la central sindical es la de que se incluyan en el documento garantías para la estabilidad del empleo en los cinco años de aplicación del plan.De forma adicional, UGT también cree que se deberían concretar más las líneas de productos de la fábrica de Granada.Por su parte, desde Comisiones Obreras señalan que su postura es la que han venido manteniendo desde la privatización de Santa Bárbara: no aceptar el cierre de centros y defender el mantenimiento del empleo.