La presión vendedora se agudiza en Santander, que cae otro 10%
El mercado prosiguió ayer con su castigo a Santander. La acción perdió el 9,98% y los seis euros por título, con lo que retrocede ya el 30,4% desde que se anunció la ampliación de capital.
Reina la desconfianza sobre la Bolsa, y la banca, como viene ocurriendo en el último año y medio, volvió a ser uno de los sectores más azotados. El temor a nuevas ampliaciones de capital y la expectativa de una desaceleración profunda ahondan el castigo al sector. Santander se convirtió ayer en el banco español más azotado. Perdió otro 9,98%, más que el 7,43% que sufrió el sector europeo. Cerró a 5,41 euros, 0,91 euros por encima del precio de la ampliación, de 4,5. Y eso que se lanzó con un descuento del 46%.
La ampliación de capital no ha gustado al mercado. Al finalizar la operación el banco contará con un 20% más de acciones, lo que implica que los beneficios se deberán repartir entre más. Con todo, este efecto dilutivo, de entre el 15% y el 20%, está más que reflejado en la caída del 30% que acumula la acción desde que se anunció la operación. Un castigo que también excede el 25,7% que pierde el sector en el mismo periodo. Así, Santander, que este año ha sido más resistente en Bolsa que el resto del sector gracias a la solidez de sus resultados, empieza a reducir esa ventaja. Pierde ya un 60,8% en el año frente al 65% que cae el índice Stoxx de banca.
La sorpresa que generó la ampliación de capital días después de que la directiva negara que necesitara mejorar los ratios de capital explica parte de la desconfianza hacia el valor. La enorme liquidez de la acción también juega en su contra ya que eso provoca que aquellos que vendan los derechos de suscripción presionen inmediatamente el precio a la baja, porque derechos y acción evolucionan a la par. Ayer comprar títulos de Santander vía derechos -cerraron a 0,22- costaba 5,38 euros cuando la acción concluyó a 5,41. Las ventas a crédito son otra explicación para muchos, por lo que no se descarta que el rebote, cuando llegue, sea violento.
¿Quién provoca la bajada de las acciones?
La caída de Santander supera el efecto dilutivo de la ampliación, estimada entre el 15% y el 20%. Fuentes del mercado señalan posibles motivos detrás de la presión vendedora.1. Minoristas. Los inversores que no deseen acudir a la ampliación venden sus derechos de suscripción. La acumulación de órdenes de ventas de derechos presiona a la baja el precio de la acción, ya que si resulta más barato comprar acciones vía derechos otros inversores pueden optar por vender sus títulos para recomprarlos después.2. Fondos descontentos con la decisión de Santander por el cambio de mensaje de la directiva también han podido decidir vender al mirar la operación con desconfianza. Algunos hedge funds pueden haber aprovechado la debilidad del valor para beneficiarse de las caídas, lo que las agudiza.3. Aseguradores. En otras ampliaciones de capital garantizadas los aseguradores han vendido títulos antes de que concluya el plazo de suscripción, presionando el precio a la baja. En este caso los aseguradores están obligados a comprar a 4,5 euros si los accionistas del banco no acuden a la ampliación. Una manera de cubrir este riesgo es vender acciones a crédito a precios superiores. Si la operación se cubre los aseguradores deberán recomprarlas en el mercado, lo que podría generar un fuerte rebote. Pero si no, como ya las han vendido, las recompran a 4,5 y ganan la diferencia.