Santander baja otro 6,89% y se coloca al borde de los seis euros
Una semana después de que el Santander anunciara una ampliación de capital por 7.200 millones, las acciones han perdido el 22%. El mercado no descarta que más bancos pidan dinero.
El tiempo no está aliviando la presión vendedora sobre Santander y el resto del sector bancario. Ayer, una semana después de anunciar la ampliación, las acciones del banco se depreciaron el 6,89% -el lunes día 10 perdieron el 5,04% tras confirmar la operación- y en las últimas cinco sesiones acumulan un descenso del 22%. Este mal comportamiento ha llevado las acciones al nivel más bajo desde mayo de 2003.
Los derechos también han sufrido un importante revés. Ayer cayeron el 24%, hasta 0,38 euros. De esta forma, el precio de las nuevas acciones se coloca a 6,02 euros (4,5 euros que cuesta cada título más los cuatro derechos), un nivel prácticamente igualado al último cierre (6,08). Santander fue ayer el valor más negociado del continuo con 787,90 millones, y los derechos el quinto (165,47 millones). 'No va a tener problemas para cubrir la operación, porque entre otras cosas está asegurada. Pero en el fondo supone una llamada de atención en el sentido de que el resto de las entidades también van a necesitar pedir dinero al mercado', explica Susana Felpeto, de Atlas Capital.
Este temor provocó importantes descensos en la jornada en otras entidades españolas. BBVA, Bankinter, Popular, Banesto y Sabadell concluyeron con caídas del 5,13%, 3,36%, 6,23%, 4,58% y 2,53%, respectivamente.
Al mismo tiempo, el índice sectorial europeo del Stoxx 600 registraba un recorte del 4,50% que llevaba el nivel a las cotas más bajas en cuatro años. Se vieron incluso descensos muy superiores que en los bancos del Ibex. Entre los peores estuvieron HBOS (-13,87%), Royal Bank Scotland (-12,35%), Anglo Irish Bank (-12,02%) y Lloyd's (-10,24%), entre otros. 'Los bancos esperaban que el G-20 les diera cierto apoyo, pero no se ha hecho nada. El sector tiene problemas de solvencia y no queda otra que hacer ampliaciones o ayudas de los Gobiernos', explica David Navarro, de Inversis.
Las fuertes dificultades por las que atraviesa el sector se vio también ayer con el anuncio por parte de Citi de que despedirá 52.000 trabajadores a comienzos de 2009. Es el mayor recorte de plantilla de la historia bancaria.