Una deuda con Aifos, detonante del concurso de Tremón
El grupo inmobiliario Tremón solicitó el viernes pasado su entrada en concurso voluntario al verse incapaz de pagar 72 millones a la inmobiliaria Aifos.
La compañía presidida por Hilario Rodríguez, que a finales del pasado año suspendió su pretensión de salir a Bolsa, tenía que pagar 72 millones de euros a Aifos ayer lunes. 'Ha sido el detonante de nuestra entrada en concurso; no solicitarlo hubiera supuesto el riesgo de que los acreedores instaran al concurso del grupo', admitieron ayer a este diario fuentes de Tremón.
Las mismas fuentes explicaron que de ese pago a Aifos de 72 millones 'ya se habían descontado 16 millones' y añadieron que se trataba de 'una cantidad que intentamos incluir en la negociación de la deuda total del grupo con los bancos, pero no fue posible'.
El concurso de Tremón es el segundo mayor que se produce en el sector inmobiliario tras el protagonizado este verano por Martinsa Fadesa. Tremón entra en concurso con una deuda de 1.000 millones de euros.
Un portavoz de Tremón detalló a Reuters que la exposición de Banco Popular al concurso es de 200 millones de euros y las de Bancaja, Banco Pastor, La Caixa, CAM, Caja Castilla-La Mancha y Cajasur de 100, 95, 80, 75, 60 y 58 millones respectivamente, entre otras. Bancaja precisó que la exposición era de 38 millones y que estaba provisionado, informa Joaquim Clemente desde Valencia. Cajasur aseguró también en un comunicado que su riesgo de crédito con Tremón se había reducido a 37 millones de euros, 'cantidad que además se encuentra suficientemente provisionada'.
Tres sociedades
Las sociedades del grupo Tremón que se han acogido a concurso, con el 99% de la deuda, indicó un portavoz, son la cabecera del grupo Tremón; la división hotelera, Tremón Hoteles y Atlantis, sociedad de Hilario Rodríguez que posee el 50% del grupo.