El nuevo plan Vive prevé incluir a automóviles con más emisiones de CO2
El nuevo plan Vive para el rejuvenecimiento del parque automovilístico se abordará este viernes en el Consejo de Ministros. Entre otras modificaciones previstas, Industria planea elevar los límites contaminantes de los coches adquiridos, que podrán recibir la subvención.
El nuevo plan Vive (vehículo innovador-vehículo eficiente) nacerá con la esperanza de que su éxito sea mayor que el de su predecesor. El fracaso del las medidas para el rejuvenecimiento del parque automovilístico que el ministro de Industria, Turismo y Comercio, Miguel Sebastián, anunció nada más llegar a su cargo han obligado al Ejecutivo a replantearse la fórmula.
Además de suprimir el tope de precio de 20.000 euros y rebajar de 15 a 10 años la antigüedad del vehículo destinado a achatarramiento, Industria quiere incluir que los coches adquiridos tengan unas emisiones máximas superiores a las planteadas en el primer plan Vive -que se situaban en 140 gramos de CO2 por kilómetro- según fuentes cercanas a la negociación. Por otra parte, la nueva propuesta de Industria plantea la eliminación del requisito que exige financiar el 100% del coste del vehículo a través del ICO.
El programa, que entró en vigor el pasado 30 de julio, sólo registró 18 operaciones en su primer mes de vida. Industria no ha facilitado, sin embargo, los datos de los 100 primeros días de vida del plan (que se cumplieron ayer), tope que se fijó Sebastián para poder hacer una evaluación con perspectiva de la eficacia de su propuesta.
Faconauto, la patronal de los concesionarios, presentó en octubre una propuesta para ampliar el Plan Vive mediante ayudas directas de 1.000 euros para la compra de coches nuevos y de 900 euros para la adquisición de vehículos usados de hasta tres años de antigüedad. Además, también pidió medidas como las antes citadas que, según parece, se han incluido en la nueva propuesta.
Según sus cálculos, si la propuesta pasara a 10 años, en lugar de los quince actuales, podría acogerse al programa en torno al 35% del parque automovilístico, en lugar del 10% actual.
'Desde la patronal sabemos positivamente que se va a flexibilizar el plan, así nos lo ha trasladado Industria, pero desconocemos cuáles serán esos cambios', dijo ayer el presidente de Faconauto, Antonio Romero-Haupold.
Sebastián, por su parte, aseguró ayer que mantendrá 'el tope presupuestario' que existía con el anterior diseño -de 1.200 millones de euros- y que se realizará 'en diálogo con el sector'.