Portugal pone bajo supervisión a BPN en espera de su nacionalización
El Gobierno de Portugal puso ayer bajo supervisión al Banco Portugués de Negocios (BPN) hasta que el Parlamento apruebe el trámite de su nacionalización, anunciada el domingo.
El Estado ha designado a dos delegados de la Caixa Geral de Depósitos (CGD) -el mayor banco del país, de propiedad pública- para que se encarguen de la supervisión de las actividades de gestión. La entidad será nacionalizada después de que se hiciera público que había acumulado pérdidas por 700 millones de euros.
Fuentes del Gobierno insistieron en que la intervención sobre BPN -que posee un banco del mismo nombre en Brasil y una pequeña red de sucursales en Francia- no está relacionada con la crisis financiera internacional, sino que se debe a problemas que arrastraba con anterioridad.
La CGD aseguró en un comunicado que, junto al Banco de Portugal, se encargará de asegurar 'plenamente la liquidez del BPN', en cumplimiento de una decisión del Ejecutivo socialista de José Sócrates que 'salvaguarda los depósitos de los clientes de la institución'. El BPN fue fundado en 1993 y cuenta con cerca de 230.000 clientes.