España destruye empleo por primera vez en catorce años
El mercado laboral español tiembla. El tercer trimestre del año se cerró con una tasa de paro del 11,33%, situando el número de parados en 2.598.800, según el INE. Lo más preocupante es que, por primera vez desde 1994 (cuando terminó la anterior crisis), la economía española ha destruido empleos en términos interanuales, con 164.300 ocupados menos.
La encuesta de población activa difundida el viernes por el Instituto Nacional de Estadística es un compendio de males. La crisis financiera global, unida a la debacle del sector de la construcción, se han cebado con el empleo en España, de modo que, en los doce meses terminados en septiembre, el número de puestos de trabajo ha registrado su primera caída interanual en catorce años: 164.300 menos. Sólo en el tercer trimestre de 2008, la economía española destruyó 78.800 empleos.
Dado que la población activa sigue aumentando en España, a causa de la inmigración y la incorporación de la mujer al trabajo (la tasa de actividad roza ya el 60%), esta destrucción de empleo viene acompañada por un fuerte incremento del paro. La cifra de desempleados alcanzó en septiembre los 2.596.800, para situar la tasa de paro en el 11,33%. En los últimos doce meses, 806.900 personas pasaron a engrosar el desempleo, de las que 642.600 son nuevos activos.
Sólo Madrid (26.100), Castilla y León (13.100) y Galicia (otros 13.100) lograron crear empleo en el tercer trimestre de este laboralmente infausto 2008. Mucho peor fue el comportamiento de otras comunidades: en sólo tres meses, el número de parados creció en 86.600 en Andalucía, 50.700 en Cataluña y cerca de 20.000 en Murcia, Comunidad Valenciana y Canarias.
El goteo de malas noticias que aparecen en la EPA continúa con el incremento de la tasa de temporalidad, que gana 14 centésimas en el trimestre, para situarse en el 29,54% del total de empleos. Si el último año se ha caracterizado por un incremento del empleo indefinido (320.200 puestos más) y un descenso del temporal (443.000 menos), el tercer trimestre ha dado la vuelta a la tortilla, con casi 100.000 empleos fijos menos y sólo 7.700 temporales menos. Así, puede concluirse que la crisis está destruyendo empleo y, al mismo tiempo, está empeorando su calidad.
La distribución sectorial de los datos de Estadística denota que la crisis no remite en el depauperado sector de la construcción: 57.600 parados más en el trimestre, y 256.100 en los últimos doce meses. Una situación que contrasta con la previsión gubernamental: el ministro de Trabajo, Celestino Corbacho, aseguró hace tres meses que la crisis en la construcción 'está llegando a su final'. Pero la sangría se ceba también con el resto de los sectores en términos trimestrales: 47.700 parados más en los servicios; 27.200, en la industria; y 26.900, en la agricultura.
Todos los sectores, salvo el terciario, perdieron ocupación entre julio y septiembre. También crece el número de parados entre los demandantes del primer empleo: (34.900 más) y los que perdieron su puesto de trabajo hace más de un año (22.900 parados).
Jóvenes, a salvo
Los únicos tramos de edad que registraron aumento del empleo en el tercer trimestre son los de la población más joven: entre 16 y 19 años (48.200 empleos) y entre 20 y 24 (40.100 puestos más); unos tramos que coinciden, por lo demás, con el empleo más precario. Por contra, el empleo se redujo en el resto de edades, destacando los 83.300 puestos perdidos entre 25 y 29 años de edad.
Rasgos principales del mercado laboral
Más parados que paradas. El fuerte empeoramiento del mercado laboral ha convivido con una tendencia positiva: la reducción de las distancias entre sexos. En el último año, hay 166.500 mujeres más trabajando, y 330.700 hombres menos, lo que lleva la tasa de paro femenina al 12,66% y la masculina al 10,4%. Por primera vez desde 1994, hay más parados que paradas.Crece el empleo para extranjeros. En los últimos tres meses, el empleo entre españoles descendió en 83.600 personas, mientras el de extranjeros aún subió en 4.800. El 14,5% de los trabajadores en España son extranjeros, colectivo cuya tasa de actividad es sensiblemente superior al nacional. Con todo, la tasa de paro de los españoles es del 10,2%, por un 17,45% de los foráneos.Repunta la temporalidad. Otra mala noticia de la última EPA es la inversión de la tendencia a reducir la temporalidad. El porcentaje de estos contratos creció en 14 centésimas, hasta el 29,54%. En el último trimestre, el empleo fijo cayó en 99.100 personas, y el temporal en 7.700. En doce meses, los contratos indefinidos crecieron en 320.000, y los temporales cayeron en 443.800.258.000 familias más sin trabajo . Durante los últimos doce meses, el número de hogares con todos sus miembros activos en paro ha aumentado en 258.000, y sólo en el tercer trimestre ha crecido en 84.300. Mientras, 10.483.800 hogares tienen a todos sus miembros activos trabajando, 70.300 menos que en el segundo trimestre y 213.900 menos que hace un año.Sólo aguantan los servicios. El sector terciario es el único que capea el temporal laboral. En el tercer trimestre se crearon 133.400 empleos en los servicios, para totalizar 13.906.400. Por contra, la ocupación cayó en la industria (45.600 personas), la construcción (134.800) y la agricultura (31.900). Los servicios son también los únicos con más ocupados que hace un año.