Tras realizar una investigación en profundidad lanzada en febrero de 2008, el Ejecutivo comunitario ha llegado a la conclusión de que el rescate se ajusta a las normas comunitarias sobre ayudas de Estado. Ello es así porque el plan permitirá la reestructuración del banco y una reducción importante de sus actividades que limitará las distorsiones de competencia.
"La venta de IKB, los importantes cambios estructurales llevados a cabo y la significativa reducción de sus actividades constituyen un conjunto de medidas que responden a las condiciones requeridas para que la decisión (de aprobación del plan) sea positiva", explicó la comisaria de Competencia, Neelie Kores, en un comunicado.
El pasado mes de agosto, la firma de EE UU Lone Star adquirió al banco alemán estatal un paquete de acciones del 90,8% de IKG, especializado en la financiación de pymes.