Carteras de menor riesgo para un escenario incierto
Los asesores reducen su exposición a Bolsa y apuestan por la gestión alternativa.
En estos momentos existen dos escuelas entre los asesores financieros sobre cómo aproximarse a los mercados. Una, más cauta, ha reducido el riesgo en las carteras de perfil más agresivo en espera de que se confirme el suelo de los mercados de valores. Otra, más audaz, la resume Félix López, director de gestión de patrimonios de Atlas Capital: 'El escenario, desde luego, es malo, pero el que tenga agallas puede ganar mucho dinero en los próximos 10 años. Estamos siendo muy conservadores en las carteras conservadoras, pero muy agresivos en las agresivas'.
Ambas tendencias coinciden, sin embargo, en que la prioridad para las carteras más conservadoras ahora mismo es la preservación de capital, por lo que las carteras propuestas de corte menos agresivo apuestan firmemente por activos de poco riesgo, como los fondos monetarios y los fondos de renta fija de retorno absoluto, que tratan de obtener rentabilidades en los mercados de deuda apostando por la apreciación o la depreciación de los diferentes activos.
'Vamos a seguir siendo muy cautelosos', comenta Daniel Aymerich, analista de fondos de Inversis Banco. 'Podemos haber visto los mínimos del mercado, pero no vamos a hacer una apuesta muy fuerte en Bolsa. Dejaremos que se confirme el suelo y sólo entonces incrementaremos el riesgo'.
Desde otro punto de vista, Marta Campello, de Abante Asesores, confirma su apuesta por los mercados de valores: 'No hemos variado nada nuestra exposición a la renta variable desde comienzos de año', comenta. 'Es peligroso salirse en momentos de turbulencia. El mercado está sobrevendido, así que apostamos por mantener la apuesta por la Bolsa, siempre que hablemos de perfiles agresivos'.
Las propuestas más agresivas no son apuestas de hoy para mañana, sino a largo plazo, de varios años. 'Si la Bolsa no sube en los próximos años, significará que el sistema ha quebrado y hemos vuelto al trueque', ironiza Enrique Borrajeros, de Abante Asesores.
Entre los activos por los que apuestan las firmas de asesoramiento sobresale claramente la renta variable estadounidense, especialmente porque los analistas esperan que el país norteamericano saldrá antes de la crisis financiera y de la recesión económica. 'Aunque estamos siendo cautos en renta variable, nos gusta más la Bolsa de Estados Unidos porque el liderazgo está siendo mayor', afirma Víctor Alvargonzález, director general de Profim. 'La actitud de la Reserva Federal es más constructiva que la del Banco Central Europeo y además en noviembre llegará un nuevo presidente sin ataduras que puede pasar a la historia'.
A este argumento se une el factor divisa y la convicción por parte de los asesores de que el dólar tiene recorrido al alza. 'Somos optimistas con el dólar a medio plazo, más que nada porque pensamos que el euro está caro', sostiene Félix López, de Atlas. A lo que hay que añadir la perspectiva de que las rebajas de tipos oficiales en los próximos meses para hacer frente a la recesión serán mayores en Europa, que tiene más margen, que en EE UU. Este experto, no obstante, matiza que en estos momentos la Bolsa europea presenta mejores valoraciones, más baratas.
Otra apuesta clara de las firmas de asesoramiento es por la gestión alternativa, especialmente para las carteras de riesgo más moderado, en las que las estrategias de rentabilidad absoluta han sustituido a la renta fija tradicional. La ventaja de estos fondos es que invierten en renta fija, pero pueden apostar por el alza o la caída de los activos, con el objetivo de obtener rentabilidades al margen de la evolución de los mercados.
'Nuestra cartera conservadora no tiene riesgo direccional, ni en renta fija ni en renta variable', explica Daniel Aymerich, de Inversis Banco. Esta firma, por ejemplo, invierte la mitad de su cartera más conservadora en fondos que invierten en renta fija a muy corto plazo, monetarios sin riesgo, y el resto lo destina a fondos de renta fija alternativa, con objetivos de rentabilidad absoluta.
Se han notado movimientos en las carteras propuestas hacia activos de calidad. Por ejemplo, Inversis ha sustituido un fondo monetario que invertía en renta fija privada por otro que destina su cartera exclusivamente a deuda pública. 'Todos los monetarios son fondos seguros, pero en estos momentos nos da más seguridad la deuda pública', subraya Daniel Aymerich.
Otros asesores perciben que en algunos tipos de renta fija se están creando verdaderas oportunidades. 'En estos momentos no invertimos en renta fija tradicional', comenta Félix López, de Atlas. 'Apostamos por monetarios, carteras de retorno absoluto y bonos convertibles', señala. Para este experto, los convertibles (un híbrido entre bonos y acciones) han sufrido un desplome hasta niveles de compañías quebradas. 'El potencial de caída es muy limitado, pero sí lo hay de subida'.
Las carteras más agresivas también apuestan por fondos alternativos, que se exponen no tanto a la dirección de los mercados como a la pericia del gestor para sacar valor añadido por encima de la evolución de los índices. Ese valor añadido es lo que se conoce como alfa, y estos fondos se denominan fondos de autor. Es el caso de carteras como el Carmignac Patrimoine, de la gestora francesa Carmignac, o el Okavango Delta, de Abante Asesores.
Varias casas de asesoramiento apuestan por fondos flexibles, en los que la distribución de activos obedece a la decisión del gestor, del que se espera que sea lo suficientemente ágil como para aprovechar las tendencias del mercado, bien reduciendo su exposición cuando caen los mercados, bien aumentándola cuando se espera que suban. 'Evitan que el inversor deba plantearse cambiar de fondo cuando la tendencia cambia; es el gestor del fondo el que realiza esos cambios', explica Daniel Aymerich, de Inversis Banco.
La rebaja del grado de riesgo de las carteras propuestas por los asesores se percibe en una reducción notable en las mismas de la presencia de activos emergentes. 'La recesión económica va a ser amplia y larga, pero la situación financiera mejorará. El problema es que los mercados emergentes viven de la situación macroeconómica', comenta Víctor Alvargonzález, de Profim. 'Por ejemplo, -dice- a Rusia le afecta la caída del precio del petróleo; China notará un descenso de las exportaciones y tendrá más problemas para financiar sus infraestructuras'.
Alvargonzález aporta, además, una propuesta de inversión muy concreta: 'estamos recomendando apostar por renta variable para aquellos a los que le queden unos 10 años para jubilarse, según, eso sí, el perfil de riesgo de cada uno. Se pueden crear planes de pensiones a precios increíbles y, además, con una gran ventaja fiscal'.
Volatilidad para cubrir las carteras de Bolsa
La volatilidad ha sido una fuente de ganancias. Los pocos fondos que apuestan por las oscilaciones de los mercados se han beneficiado de las cotas máximas alcanzadas la semana pasada. Sin embargo, los asesores han comenzado a reducir su exposición a estas carteras, principalmente porque los máximos recientes hacen difícil a priori que la volatilidad siga subiendo. Las firmas han reducido su exposición a estos fondos, como el CAAM Volatility de Credit Agricole, para las carteras más conservadoras, pero los mantienen para las más agresivas. Este fondo se ha revalorizado un 15% desde comienzos de año. El argumento es que la volatilidad se dispara sobre todo cuando caen las Bolsas, así que un fondo de estas características puede servir para mitigar las pérdidas de una cartera bursátil.