Renfe decide prescindir del aval del Estado en sus emisiones de deuda
La red de ferrocarriles públicos Renfe renuncia al aval que el Estado le otorga desde hace más de 15 años para sus emisiones de deuda. La empresa estatal asegura que no lo necesita, que no ha recurrido a él en ese periodo y que 'da mala imagen de cara a Bruselas'. Por ello, ya no se incluirá en los Presupuestos de 2009.
Renfe se considera a sí misma como una empresa solvente. Históricamente en la ley de Presupuestos Generales del Estado (PGE) se incluía, en el capítulo referente a los Avales Públicos y Otras Garantías, un aval del Estado a 'la entidad pública empresarial Renfe-Operadora por un importe máximo de 180,3 millones de euros'. Sin embargo, desde hace 15 años no se ha hecho nunca uso del mismo, según aseguran fuentes del ente público.
Por este motivo, y porque a la Comisión Europea (CE) no le suele agradar los avales públicos en determinados ámbitos, Renfe ha pedido al Ejecutivo, y este presumiblemente ha aceptado, prescindir de este aval y, por tanto, que 'en el proyecto de ley actualmente en fase de tramitación parlamentaria para 2009 desaparezca esta alusión a Renfe', aseguran desde la red ferroviaria.
El operador público considera que desde Bruselas se puede llegar a pensar que esta garantía es una forma de subvención estatal, algo que desde Renfe intentan evitar por completo ya que no se permiten ciertas ayudas públicas. En la compañía reciben subvenciones en los trenes de cercanías y en los de media distancia, pero no en el caso de la larga distancia, pues recibirían una multa por parte del ejecutivo europeo, principalmente por la cercana liberalización del sector que se fecha en 2010.
En cuestiones de competencia transfronteriza, que se puede llegar a dar con el ferrocarril francés y el portugués, la CE no ve con buenos ojos los avales públicos porque da a la empresa que lo posee una ventaja competitiva frente al resto debido a que supone una garantía frente a los competidores y, además, el endeudamiento de las mismas resulta más barato.
La abultada deuda que Renfe mantenía históricamente se vio drásticamente rebajada a finales de 2004 cuando el Estado asumió 5.459 millones de euros (cerca del 80%) de los 7.300 millones que acumulaba la empresa pública, antes de la separación entre Adif (ente gestor de las infraestructuras ferroviarias españolas) y Renfe Operadora (compañía que se quedó con la explotación de los ferrocarriles).
En ese momento, el ministro de Economía, Pedro Solbes, aseguró que sólo así podría darse viabilidad a la empresa pública cuando entrara en vigor en 2005 la Ley Ferroviaria, que liberaliza el servicio, y por la que Renfe, a partir de 2010, será una empresa más a competir con otras privadas.
Lo último que se ha sabido de su deuda, lo aclaró la semana pasada el presidente de la ferroviaria, José Salgueiro, cuando indicó en el Congreso de los Diputados que la deuda que tiene la empresa en la actualidad se mantiene en las cantidades previstas, que está en un ratio de 0,88 con respecto a los ingresos propios.
Solvencia en el balance
El presidente de Renfe aseguró en el Congreso que los Presupuestos correspondientes a 2009 serán los últimos en los que la compañía recibirá compensaciones por el déficit en los negocios ferroviarios liberalizados que la operadora debe prestar en competencia.
Pese a todo, la compañía ferroviaria espera incrementar un 18,4% sus ingresos, hasta los 2.621 millones de euros, y elevar más de un 20% el tráfico de pasajeros en 2009, gracias a los servicios de alta velocidad y el refuerzo de cercanías y media distancia, tal y como informó el domingo Renfe.
El precedente de la prohibición del aval ilimitado a RTVE
El aval ilimitado de Radio Televisión Española (RTVE) sentó un precedente en la concesión de garantías públicas a las empresas que dependen del Estado. Aunque el aval a RTVE era ilimitado -y Bruselas directamente exigió el fin- pueden existir ciertas similitudes entre ambos casos. Por ello, Renfe ha optado por adelantarse y prescindir de esta garantía.En el caso de RTVE, la CE exigió hace cinco años a las autoridades españolas que reformasen el sistema de garantía pública ilimitada del que se beneficiaba la televisión pública porque consideraban que violaba las reglas de competencia sobre ayudas del Estado. El aval público ilimitado del que se beneficiaba RTVE suponía una garantía frente a los acreedores y evitaba la quiebra del grupo empresarial.
Presupuestos 2009
La compañía estatal Renfe recibirá del Estado 491 millones en 2009, un 13,94% menos. Del total presupuestado, 64 millones cubren déficit de negocios que debe realizar en competencia. La empresa prevé incrementar sus ingresos un 18,4% el año que viene.