Una tregua para el atún rojo
Es uno de los manjares más apreciados por la cocina nipona y su consumo está en pleno auge en Europa y EE UU por el continuo goteo de nuevos restaurantes de sushi y la promoción de las bondades de su carne, rica en ácidos omega 3. Sin embargo, el atún rojo podría tener los días contados, según los científicos y las organizaciones ecologistas. La sobrepesca a la que están sometidos los túnidos a escala mundial amenaza el futuro del negocio y de la especie. En 2007 se registraron 61.000 capturas en todo el mundo, 'más del doble de la cuota legal asignada', según han denunciado al unísono esta semana las organizaciones ecologistas españolas en Barcelona.
La Ciudad Condal acoge hasta el martes el Congreso Mundial de la Naturaleza, uno de los foros internacionales más importantes sobre medio ambiente, en el que participan 8.000 personalidades, y al que se han sumado las empresas. En él, científicos de 48 países han pedido la creación de un santuario en Baleares para dar una tregua a la especie y evitar su colapso. El caladero balear es histórico en el comercio de atún rojo. Hace seis años salían de sus redes 14.000 toneladas hacia el mercado mundial, en el que España es líder. Hoy, apenas se extraen 2.000 toneladas anuales.
El Mediterráneo es el espacio natural de esta especie. Cada primavera miles de atunes emigran desde las frías aguas del Atlántico hacia un lugar más cálido donde reproducirse. Por ello, las organizaciones ecologistas creen necesario acotar una zona de protección en aguas baleares, 'imprescindible para la puesta', según explicó a este diario Sebastián Losada, responsable de la campaña de Océanos de Greenpeace, a bordo del Arctic Sunrise, uno de los buques insignia de la organización. La caída de capturas en aguas baleares y las restricciones en los periodos de pesca ha empujado al sector hacia Italia, Malta, Libia y Turquía, países que no respetan las cuotas asignadas, según los expertos. Además, algunos de ellos aumentan sus flotas cada año.
La pesca en las aguas del archipiélago balear ha caído de 14.000 toneladas en 2002 a apenas 2.000 hace dos años
Mientras España cuenta con 6 barcos de cerco, Francia dispone de 40, Italia de 80 y Turquía, de 125. En Italia, la organización WWF ha denunciado 'la falta de controles, barcos pesqueros piratas y puertos fantasma' como práctica corriente en este país.
'Es obvio que si la cuota asignada cada vez es menor y hay que repartirla entre varios barcos, no es rentable y se buscarán otros medios', reconocen desde el sector pesquero. 'Hay demasiados barcos pescando atún rojo y no puede ser bueno', explican desde Ricardo Fuentes e Hijos, uno de las empresas más grandes del sector. La compañía murciana fue pionera en los noventa en la creación de jaulas en el Mediterráneo para el engorde del atún, una de las causas que impiden la reproducción del animal, según los expertos. En los últimos diez años, la compañía ha incrementado sus activos en un 3.200%. Su facturación media roza los 200 millones de euros. El 90% de su producción acaba en Japón, mercado natural del atún rojo. Para la compañía, 'la eficacia del santuario será mínima respecto al stock. Una consecuencia segura es que las granjas de atún en España desaparecerán', sentencia un portavoz.