Las hamburguesas se hacen adultas
McDonald's lanza el sándwich Mac, dirigido a un público de más edad.
Ni ketchup ni mostaza. Ni siquiera el tradicional bollo de pan de las hamburguesas. El nuevo bocadillo de McDonald's, bautizado como Mac, tiene como auténtica protagonista a la carne de vacuno, que se acompaña de queso emmental, lechuga, tomate y pan tipo chapata. Y su público objetivo es más adulto que el que habitualmente consume el resto de sus hamburguesas.
El lanzamiento del nuevo producto en España viene precedido de la experiencia de otros mercados como el alemán, el portugués y el francés, donde en una semana ha logrado superar en ventas a la que hasta ahora ha sido la estrella de la cadena, el Big Mac. La nueva hamburguesa se ha elaborado en el Food Studio, un centro de investigación y desarrollo de nuevos productos McDonald's que tiene su sede en Múnich (Alemania) y que cuenta con el asesoramiento del reputado chef Adrian Coulter.
El Mac, que se vende a un precio de 4,20 euros en el formato individual y a 6,20 en el menú mediano en los restaurantes McDonald's de España y Portugal, es una de las medidas adoptadas por la compañía para tratar de acercar su imagen a la idea de calidad y alejarla de la que la asocia a comida basura.
Ya a principios de año la cadena anunció a principios de este año su intención de invertir cinco millones, es decir, el 20% de su presupuesto anual en publicidad y marketing, para luchar contra el principal freno para su crecimiento: las dudas sobre su calidad y lo que desde la empresa se consideran falsos mitos.
El lanzamiento de la nueva hamburguesa se encuadra en este objetivo y aunque el precio del Mac es ligeramente superior al de otros productos de la cadena aún se encuentra a una inmensa distancia del lanzamiento que Burger King protagonizó hace unos meses, eso sí, tan sólo, al menos de momento en el mercado británico. Bautizada como The Burger, su precio al cambio ronda los 120 euros. Eso sí, sólo se encuentra disponible en uno de los locales londinenses de la cadena situado en el elitista barrio de Kensington.
También en este caso el bocadillo se aleja de las salsas tradicionales que caracterizan a las hamburguesas estadounidenses y se acerca más a los gustos europeos, que es precisamente el objetivo que buscaban los directivos de McDonald's a la hora de lanzar una nueva hamburguesa.
La carne de la Mac es, como en el resto de las hamburguesas de McDonald's, de vacuno. Sin embargo, fuentes de la cadena explican que la diferencia con el resto estriba en la textura de la carne 'por el corte de las piezas de carne y el proceso del picado así como en el hecho de no llevar ninguna de las clásicas salsas de nuestras hamburguesas, lo que potencia el sabor'.
McDonald's España no ha querido desvelar la inversión realizada en el lanzamiento de su nueva hamburguesa.
Los restaurantes de comida rápida sortean la crisis
Desde McDonald's se asegura que el lanzamiento de su nueva hamburguesa no tiene nada que ver con la crisis. De hecho, todas las cadenas de restauración de servicio rápido están consiguiendo sacar partido a la coyuntura, ya que cada vez es mayor el número de clientes que no renuncia a salir de casa, pero no pueden o no desean gastar mucho dinero. Por ello, este tipo de establecimientos están de moda. 'De hecho, nuestras ventas están evolucionando favorablemente y están cumpliéndose nuestras previsiones para este año porque los consumidores saben que ofrecemos productos de calidad a precios asequibles; un compromiso que se agradece especialmente en el contexto de la actual coyuntura económica', explica Alexandre Simón, director de marketing de McDonald's.