AMD se divide en dos empresas para poder competir con Intel
El fabricante estadounidense de semiconductores AMD ha segregado su área de fabricación tras contar con el apoyo de dos compañías del Gobierno de Abu Dhabi, que inyectarán en el proyecto hasta 8.400 millones de dólares (6.173 millones de euros). El gigante de los chips busca así poder competir con Intel.
AMD anunció ayer su intención de partirse en dos compañías diferentes: una enfocada al diseño de los chips y, otra, encargada del costoso negocio de fabricarlos. La decisión, pronosticada hace ya algunas semanas por analistas del sector, se produce en un momento en que las deudas (más de 5.300 millones de dólares a junio de este año) tienen atenazada a AMD.
La firma, que lucha por competir con Intel, ha recibido en este cambio estratégico el apoyo de dos compañías inversoras ligadas al Gobierno de Abu Dhabi, de Emiratos Árabes. Ambas realizarán una inversión conjunta de 8.400 millones de dólares.
En concreto, Advanced Technology Investment Company (ATIC) pagará 700 millones de dólares a AMD por una participación en la nueva empresa de fabricación, que se llamará temporalmente The Foundry Company, y que será propietaria de dos plantas en Alemania y de otra que se construirá en Nueva York, que creará más de 1.400 puestos de trabajo directos. La nueva empresa, que asumirá 1.200 millones de deuda de AMD, recibirá de ATIC hasta 6.000 millones durante los próximos cinco años para expandir las factorías, y 1.400 millones en capital operativo. La otra empresa que participa en el proyecto es Mubadala Development Company, que pagará 314 millones para aumentar su participación en AMD del 8,1% que tiene ahora al 19,3%.
La compañía estadounidense de chips será dueña del 44,4% de la nueva entidad, que fabricará procesadores tanto para AMD como para otras empresas. ATIC controlará el 55,6% restante. Ambas firmas compartirán el poder de decisión, según explicaron en un comunicado.
El giro de AMD, que ayer subió en Bolsa un 9% hasta los 4,6 dólares, busca poder competir de una forma más directa con Intel, ya que la nueva estrategia le permitirá crear nuevos productos sin necesidad de invertir miles de millones de euros en plantas de fabricación, según explicó su consejero delegado, Dirk Meyer. æpermil;ste asegura que el cambio 'hará más fuerte económicamente a AMD y le permitirá focalizar sus esfuerzos'.
Una reestructuración esperada por la industria
Los analistas del sector coincidían en que AMD necesitaba segregar la fabricación de chips si quería seguir siendo competitiviva. Primero, por el alto coste que implica abrir nuevas fábricas. Y, segundo, por el gran poder inversor de su rival, Intel, que invierte en plantas e investigación más de lo que AMD factura anualmente. Esta compañía, que ha sufrido pérdidas anuales en nueve de los últimos 15 años y ha sufrido una caída del 90% en el valor de sus acciones desde que alcanzara los 42,10 dólares en febrero de 2006, ha explicado que contribuye con la nueva empresa aportando sus fábricas en Dresden (Alemania), además de sus activos y derechos de propiedad intelectual. Igualmente, 3.000 de sus 16.000 trabajadores se incorporarán a la nueva corporación, que será dirigida por Doug Grose, actual vicepresidente del área de fabricación de AMD.