Las aerolíneas se desploman en Bolsa por el temor a que se vuele menos
Las aerolíneas vivieron ayer una caída generalizada en los parqués europeos arrastradas principalmente por la crisis financiera. El temor a que se viaje menos en el actual escenario económico hundió sus cotizaciones. El precio del petróleo Brent, que ayer bajó en una sola jornada 6,6 dólares por barril, no consiguió frenar las bajadas en el sector aéreo que lideró la británica British Airways, con un desplome del 12%.
El pánico que ayer se vivió en los mercados europeos motivado por la crisis en el sistema financiero mundial ha hecho mella en el sector aéreo en el viejo continente. Las principales aerolíneas europeas sufrieron ayer drásticas caídas en los parqués, por encima de los índices de referencia de cada uno de los países.
El posible bajón de la demanda de vuelos, más acusado que el que se está registrando actualmente, por el temor de que la sangría financiera afecte a todos los segmentos es, según varios analistas, la razón principal de las caídas generalizadas en el sector. Los expertos consideran que el temor a que la crisis financiera se contagie a la economía real ha hecho que se desplomen todos los sectores más ligados al crecimiento económico, incluidas las aerolíneas.
El alivio que deberían haber experimentado las compañías aéreas por la bajada de los precios del petróleo Brent, que ayer se situó en los 83,68 dólares por barril -en solo un día esta materia prima bajó más de 6 dólares-, no se ha reflejado en sus cotizaciones de las últimas semanas y mucho menos ayer. El analista de Panmure Gordon, Gert Zonneveld, considera que la preocupación por el descenso de las ventas ha pesado más entre los inversores que la bajada del precio del combustible, según recoge Bloomberg.
El posible retraso en la fusión Iberia-British influyó en el valor de ambas
La mayor caída del día la registró ayer la británica British Airways con una caída del 12%, hasta situarse la acción en 145 peniques. El anuncio hecho por su consejero delegado, Willie Walsh, de que la fusión entre la aerolínea que dirige e Iberia se va a retrasar más de lo esperado -Walsh la situaba la semana pasada en marzo de 2009- influyó negativamente en la cotización de ambas. Además las malas previsiones de tráfico que hacía el propio Walsh la semana pasada también han pesado en su valor bursátil. Walsh apuntó el viernes que la venta de billetes en primera clase había caído un 8,6% debido a que los ejecutivos viajan menos.
La compañía que preside Fernando Conte, por su parte, cayó en la Bolsa un 8,38% quedándose en los 1,53 euros por acción. Gonzalo Sanz, analista de Venture Finanzas, considera que a Iberia le han penalizado todas las noticias relacionadas con British. 'A pesar de que en agosto la cotización de Iberia subió al hilo de las especulaciones sobre la fusión, la acción se ha visto afectada por todo lo relacionado con British: su plan de pensiones y el retraso de la fusión' apunta el analista de Venture Finanzas.
Una posible venta
Detrás del descenso acusado de British se situó el grupo escandinavo SAS, propietario de la deficitaria compañía española Spanair, que cerró su cotización ayer con un desplome del 9,6% hasta situarse en 44,1 coronas suecas (4,5 euros) por acción. Ni el rumor de la posible compra del grupo que circula por los mercados pudo hacer frente a la caída del precio de sus acciones. El analista de Danske Bank, Mads Zink, explicó ayer a Bloomberg que dicha posible venta del grupo parece haberse pospuesto y 'el mercado parece haber entendido que la absorción de SAS está lejos'.
En el resto de las empresas del sector el panorama no fue mucho mejor. Air France-KLM se dejó ayer en el parqué parisino un 6,2%, justo en el día en el que la franco holandesa anunciaba que rebajaría su recargo por combustible hasta 15 euros tras encontrarse con un precio del Brent más bajo. La alemana Lufthansa, por su parte, cayó un 7,22% mientras que la mayor aerolínea de bajo coste de Europa, Ryanair, también perdió un 8,86% de su valor en la Bolsa irlandesa.
La otra española cotizada, la low cost Vueling, también se dejó en el parqué un 7,25% hasta colocarse en un valor de 3,71 euros por acción. Gonzalo Sanz considera que los malos datos de tráfico de septiembre, en los que la tasa de ocupación cayó considerablemente, han ayudado a que la acción de la aerolínea siga su tendencia a la baja.
Viajes y ocio
El sector de viajes y ocio europeo sufrió ayer un retroceso en el índice europeo de un 6,92%, siendo British Airways la segunda empresa con mayor caída de la industria. El temor a que la crisis financiera contagie a la economía real hace que el mercado crea que se volará menos próximamente.
Los porcentajes de ocupación bajan
A falta de que las algunas aerolíneas europeas -entre ellas, Iberia- den a conocer sus datos de tráfico en septiembre, las primeras cifras no han sido nada optimistas para un sector que cierra con septiembre uno de sus peores veranos. La compañía de bajo coste española Vueling anunció la semana pasada un descenso en su número de pasajeros de un 20% de en septiembre con respecto al mismo mes del año pasado. El porcentaje de ocupación, un indicador real sobre los billetes vendidos por vuelo realizado, ha bajado en ese mismo mes en 8,5 puntos porcentuales hasta situarse en 70,2% de ocupación. British Airways, por su parte bajó en más de dos puntos este porcentaje, aunque fue especialmente significativo el descenso en el segmento Business.Fuera del continente europeo, la estadounidense United Airlines anunció ayer un pequeño descenso de su porcentaje de ocupación de 0,5 puntos respecto a septiembre del año pasado. El número de pasajeros transportados, sin embargo, cayó cerca del 8%.Contrastan con la caída generalizada los datos de las dos mayores low cost europeas, Easyjet y Ryanair, que se han salido de la tendencia bajista. La británica Easyjet logró un aumento en su número de pasajeros del 22,1% y un aumento en su tasa de ocupación de 1,8 puntos. La irlandesa Ryanair, por su parte, aumentó su número de pasajeros un 20% hasta alcanzar los 5,2 millones de pasajeros. Su factor de ocupación, por el contrario, bajó un 1%.