ACS presenta la mejor oferta por la alta velocidad lusa
La española ACS se ha colocado como favorita para construir el primer tramo de la línea de alta velocidad ferroviaria que llegará a Lisboa. La compañía forma consorcio con Brisa y Soares Costa, entre otras, y ha ofrecido instalar vías entre Poceirao y Caia por 1.323,9 millones de euros.
La segunda oferta más competitiva la ha realizado Somague, firma lusa del grupo Sacyr Vallehermoso. En su consorcio viajan entidades como Mota-Engil y Banco Espirito Santo, y la puja alcanza los 1.334,1 millones de euros.
Cintra, filial de Ferrovial, está acompañada por Meridiam Infraestructure Finance y su propuesta suma 1.489 millones.
Por último, la francesa Eiffage estaría dispuesta a hacerse con las obras por 1.759,5 millones.
El contrato de concesión alcanza los 40 años, de los que cuatro se irán en la fase de proyecto y construcción y el resto en su mantenimiento. Las obras deberían comenzar en 2010 y la línea Lisboa Madrid estará operativa en 2013. Las previsiones apuntan que el viaje entre las dos capitales se llevará dos horas y 45 minutos.
Nuevas autopistas
La construcción y posterior explotación de la autopista portuguesa Pinhal Interior ha atraído las ofertas de ACS y FCC. La carretera, de 173 kilómetros, precisa una inversión de 770 millones.
Al proceso, que forma parte del programa de concesiones de autopistas promovido por el Gobierno por un valor de 5.000 millones de euros, han concurrido cuatro consorcios.
ACS lidera un primer equipo en el que están su constructora Dragados y su concesionaria Iridium. El grupo que preside Florentino Pérez va acompañado por Desarrollo de Concessiones Viárias Uno, Edifer, Tecnovia y Conduril.
FCC también ha colocado a su constructora y a la concesionaria Globalvía, participada al 50% con Caja Madrid. Junto a la española trabajan Soares da Costa, Ramalho Rosa y Operalia.
Los otros dos consorcios están encabezados por dos de las mayores empresas de infraestructuras del país vecino, Brisa (participada por Abertis) y Mota-Engil.
Al mismo tiempo, FCC y Sacyr han confirmado su presencia en el concurso de concesión de la autopista Trasmontana, de 130 kilómetros en el Noroeste de Portugal. La inversión prevista alcanza los 1.000 millones, según el Ministerio de Obras Públicas luso.