Martifer prevé impulsar el crecimiento de su división solar un 50% en un año
Martifer Solar estrenará su nueva planta de producción de módulos fotovoltaicos el año que viene con aspiraciones de incrementar en un 50% su crecimiento. La portuguesa ya factura unos 130 millones con esta filial.
Martifer Solar inició su expansión internacional entrando en el mercado español hace un año y medio sin apenas notarlo. 'La empresa siempre se ha sentido ibérica', afirma Alberto Rabanal, director general de la compañía en España. Martifer Solar es una de las filiales del conglomerado portugués Martifer, que abarca unas 120 empresas en 15 países repartidas en cuatro actividades principales: construcción metálica, sistemas de energía, agricultura y biocombustible. No se diluye en el conjunto. La división para la energía solar fotovoltaica prevé facturar entre 120 y 130 millones de euros en 2008, mientras que el objetivo del grupo es alcanzar unos ingresos de 1.000 millones este año, según los datos que facilita Rabanal.
En España, ya ha realizado proyectos por 35 MW y cerrará el año instalando tres MW más. El director general destaca que 'la flexibilidad' en cuanto a proyectos y a clientes que tiene la empresa 'nos ha dado las herramientas necesarias para crecer muy rápidamente este año'.
Además de las iniciativas llevadas a cabo en España, Martifer Solar ha cerrado un acuerdo en Bélgica de 30 MW para desarrollar sobre tejados industriales, otro de 20 MW en Francia para el que ha desarrollado una solución arquitectónica novedosa que le permita la integración en el edificio y tiene presencia en Grecia, Italia, Angola y EE UU.
'Analizamos las necesidades del mercado y fabricamos en consecuencia, en eso se basa nuestra flexibilidad', afirma Rabanal. El director ejemplifica este punto en el hecho de que 'igual construimos una planta de varios megavatios en suelo que realizamos una instalación a 250 metros de altura montada por alpinistas', como la que han desarrollado en la Torre de Cristal de la Mutua Madrileña, en Madrid.
La empresa estrenará el año que viene una planta de producción de módulos fotovoltaicos al sur de Oporto (Portugal) con una capacidad de 50 MW. Globalmente, emplean a unos 130 empleados, de los que unos 12 trabajan en España.
Acuerdos de suministro
La compañía cuenta con varios acuerdos de suministro para producción propia, como el alcanzado con Gintech para 100 MW en células fotovoltaicas, que podrá abastecer la fabricación de la planta. Además, ha firmado otro acuerdo de suministro de 30 MW en módulos fotovoltaicos con Solarfun.
Esta capacidad de abastecimiento les permite atender a sus actuales clientes y a los futuros y estimar un 'crecimiento para el año que viene en ventas del 50%' para la división solar, según Rabanal. El ejecutivo es consciente de que estas previsiones son 'conservadoras'. 'Ahora mismo es muy complicado hacer una estimación de cuánto podremos crecer en España. El futuro Real Decreto es un tema que nos nubla la visión', afirma Rabanal. 'No sabemos cómo quedará el texto definitivo pero los comentarios de los expertos son negativos', valora. 'Habría que hacer una reflexión de Estado porque es una pena que perdamos el liderazgo tecnológico y que se arriesguen 20.000 empleos', agrega Rabanal. Sin embargo, el directivo no cree que la nueva norma vaya a ser 'tan desastrosa como parece'. 'Si se es flexible, se podrá seguir creciendo', afirma.
De hecho, Martifer ya tiene prevista una ampliación de su planta de producción para 2010, para llegar hasta los 100 MW en fabricación de módulos fotovoltaicos. A partir de aquí y en función de 'cómo evolucionen los precios del silicio', que han subido espectacularmente los últimos años, la empresa se plantea 'la integración vertical en el proceso de producción aunque aún hay que definir el proyecto', asegura.
Un nuevo mercado en África
Fuera de las fronteras europeas, Martifer ha iniciado su apuesta por desarrollar su filial solar en Angola (África). Pese a que sus competidores miran con recelo los mercados africanos y sólo se atreven a instalarse en el norte del continente por cuestiones de estabilidad de regulación y retribución, Martifer Solar se ha atrevido con este país del suroeste de África 'por ser un lugar en el que existen grandes necesidades de electrificación'.El conglomerado ya estaba allí presente a través de su división de construcción y aluminio y ha aprovechado esta pata para iniciar las conversaciones con instituciones públicas y organizaciones empresariales que les acompañen en sus proyectos. 'También nos acompaña el hecho de que en Angola se hable portugués', afirma Rabanal. El directivo es consciente de que Angola forma parte de una serie de países 'complicados', en los que la rentabilidad económica de los proyectos no está tan clara, 'pero los sistemas aislados de electricidad contribuirán decisivamente al desarrollo', afirma.