La ocupación hotelera cae un 5% y agrava el ajuste en el turismo
La ocupación hotelera en España cayó un 5% en agosto, según los datos provisionales de la patronal de los hoteleros. El Ejecutivo pondrá en marcha, tal y como anunció hace unas semanas, un plan para compensar la menor llegada de turistas en los dos primeros meses de temporada alta.
Las alarmas del sector turístico se dispararon en julio, en el que llegaron a los principales destinos turísticos 622.000 turistas menos que en el mismo mes de 2007. Ese descenso, el mayor en un mes desde mayo de 2003 y el más alto registrado en julio en la serie histórica que se mide desde 1998, estuvo provocado por la desaceleración económica de algunos grandes mercados emisores (Francia, Italia y Portugal) y tuvo como resultado una caída pronunciada en la llegada de turistas en todas las comunidades, en especial en Cataluña y Andalucía.
Y esa tendencia parece que se ha mantenido en agosto. Según los datos provisionales que elabora la Confederación Española de Hoteles y Alojamientos (Cehat), a los que ha tenido acceso CincoDías, la ocupación hotelera en agosto cayó un 5% respecto al mismo mes de 2007. En julio, la ocupación aún crecía a un ritmo del 0,9%, según el INE.
Para JoanMolas, presidente de Cehat, el balance de agosto presenta un saldo negativo, "aunque debe ser considerado como positivo, si se tiene en cuenta que en 2007 se batió un récord histórico".
Los destinos que más han sentido la desaceleración del turismo han sido la Comunidad Valenciana y Madrid. Así, la ocupación en agosto cayó un 6% en Madrid, un 4% en Benidorm, un 5% en Castellón o un 9%enMurcia. Andalucía, Cataluña, Baleares y Canarias han resistido mejor el enfriamiento y presentan niveles de ocupación similares a 2007. Incluso en Cádiz oHuelva, el número de pernoctaciones ha sido superior.
Este escenario obligará al Ejecutivo a aprobar, tal y como prometió elministro de Industria, Miguel Sebastián, un plan para reactivar la llegada de turistas en el último trimestre. Pese a ello, el Gobierno mantiene que el año se cerrará por encima de 60 millones de visitantes, lo que implicaría un crecimiento similar al de 2007 (en torno al 2%).
Un hecho difícil de lograr en un escenario mundial plagado de dificultades.Un buen ejemplo se produjo el viernes con la quiebra del tercer operador turístico de Reino Unido, XL Leisure, "por la volatilidad de los precios y la recesión ". Y lo peor puede estar por llegar. José Manuel Maciñeiras, presidente de la Agencia Española de Agencias de Viajes (Aedave), espera que septiembre y octubre, "meses tradicionalmente buenos para los viajes de negocios y para turistas con un nivel económico elevado que huyen de la masificación" compensen el estancamiento de julio y agosto.Maciñeiras, no obstante, no lo tiene tan claro sobre la evolución para 2009. "Si la inflación no cede y los tipos de interés no bajan, podemos tener un año muy complejo", augura.
La desaceleración hace mella en el empleo
A menos llegadas de turistas, menos necesidad de contratar empleados. Los empresarios turísticos parecen haber seguido al pie de la letra esta máxima y han echado el pie al freno en lo que a contrataciones se refiere ante la desaceleración del sectorEn julio, último dato disponible, había 2,1 millones de trabajadores dados de alta en actividades relacionadas con el turismo, lo que supone un aumento de un 1,3% respecto al mismo mes del año anterior.De esta manera, la contratación laboral creció al ritmo más bajo de la serie histórica (que se mide desde 1999) en un mes en el que tradicionalmente la demanda de empleados crece con fuerza al ser temporada alta. El colectivo más afectado por el enfriamiento del sector ha sido el de los autónomos, en el que el número de puestos de trabajos creados se estancó al crecer un exiguo 0,9% interanual.De los 2,1 millones de trabajadores dados de alta en julio, 1,4 estaban empleados en hostelería y agencias de viajes. Por sectores, el que más empleados tenía era el de restauración, con 992.965 trabajadores, seguido por el de hoteles y alojamientos, con 334.067 personas.Sin embargo, la creación de empleo no ha sido igual en todas las ramas. De este modo, la contratación en los restaurantes se incrementó un 1,1% en tasa interanual, mientras que los hoteles se llevaron la peor parte, al caer un 0,4%. Ese descenso supone que en el mes de julio había empleadas casi 1.300 personas menos en esta actividad que un año antes.Este recorte no tiene parangón en la serie histórica y representa la primera vez en la que el empleo en los hoteles sufre un retroceso desde 1999.