El año terminará con más de 2,8 millones de parados, según Afi-Agett
El paro seguirá aumentando "sin descanso" en los próximos meses, hasta el punto de que a final de año se superarán los 2,8 millones de desempleados, la cifra más alta desde mayo de 1996, cuando el número de parados registrados en el antiguo Inem alcanzó los 2.813.180, según el ''Avance del Mercado Laboral'' que elaboran Analistas Financieros Internacionales (Afi) y la patronal de grandes empresas de trabajo temporal (Agett).
Los autores de este estudio realizan esta previsión teniendo en cuenta que en lo que va de año no se está produciendo un comportamiento estacional del paro como el observado en años "normales".
Además, advierten de que el patrón de crecimiento del paro, antes dominado por el repunte de la población activa, ha cambiado, y que el volumen de desempleados está aumentando como consecuencia de que se está destruyendo empleo.
En este sentido, Afi y Agett avisan de que "no hay suelo en la destrucción de empleo" ni en cómo aumenta el ritmo en el que cae. En concreto, en el informe se estima que el empleo retrocederá un 0,7% en el tercer trimestre y un 1,8% internanual para el mes de noviembre, lo que devolverá el número de trabajadores a niveles de hace dos años. Así, consideran previsible que la cifra de ocupados baje de los 20 millones entre finales de este año y principios de 2009.
Como consecuencia de la "caída libre" que experimentará el empleo en los próximos meses, los servicios públicos de empleo (lo que antes se llamaba Inem) atravesarán "serios apuros financieros", una situación que afectará en menor medida a la Seguridad Social, según el informe.
Cerca de la recesión de 1992-1994
El "Avance del Mercado Laboral" también advierte de los importantes crecimientos del paro que están experimentando los servicios, el sector 'soporte' de la economía española, y de que la industria está perdiendo empleo cada vez con mayor intensidad, acumulando ya seis meses de crecimientos negativos en su ocupación.
Para Afi-Agett, el deterioro de la economía española se acercará al de la recesión sufrida entre 1992 y 1994, cuando el PIB retrocedió cuatro trimestres consecutivos y la destrucción de empleo persistió durante 10 trimestres seguidos, con casi 700.000 empleos perdidos.
Aunque la economía española aún crece en positivo (0,1% en el segundo trimestre), frente a la situación de los principales países de la zona euro, que están ya en negativo, su mercado de trabajo es más débil que en estos países, pues España se mantiene como el país europeo con mayor tasa de paro (11%).
Afi y Agett atribuyen la escalada que ha experimentado la tasa de paro en el último año a la "rigidez" del mercado laboral y a la existencia de elementos estructurales que no favorecen bajas tasas de desempleo.