La demanda de cursos de chino aumenta entre los profesionales
Hay profecías autocumplidas. China, por ejemplo. La gente ha escuchado tanto que el gigante asiático va a ser la potencia del siglo XXI que ha terminado aceptándolo. Y como postula el Teorema de Thomas, 'si una situación es definida como real, tiene efectos reales'. En este caso la teoría se cumple no sólo en las monstruosas cifras macroeconómicas que suelen provenir del gigante asiático sino también en asuntos más simples y personales como el aprendizaje de idiomas. 'La demanda de chino se ha incrementado claramente en los últimos años', comenta Pilar Díaz, vicedirectora de la Escuela Oficial de Idiomas de Madrid Jesús Maestro, que enseña este idioma desde 1964. El Departamento de Chino de esta escuela ha visto triplicarse el número de solicitudes recibidas en los dos últimos cursos, desde las 442 a las 1.262, pero este año sólo podrá matricular a 400.
Y aunque el chino representa sólo el 4,4% de sus 9.000 alumnos, es el idioma con más estudiantes después de los cinco mayoritarios (inglés, francés, alemán, español e italiano). Díaz encuentra la explicación a este fenómeno en la apertura de China al mundo. 'La enseñanza de una lengua extranjera está muy ligada a la situación socioeconómica. Por eso el aumento de las relaciones económicas de China con empresas españolas ha potenciado el interés por su lengua y su cultura', sostiene.
En las academias privadas la tendencia es la misma. Según el centro de estudios CCC, el número de alumnos matriculados en su curso de mandarín aumentó este año un 10% en comparación a 2007. Este centro estudió recientemente el perfil de sus 1.000 estudiantes y encontró que la principal motivación es profesional. La mayoría lleva el curso porque su empresa ya trabaja en China o tiene proveedores chinos, o porque éste es un mercado estratégico en su plan de expansión. Incluso, muchos de ellos viajan con frecuencia al gigante asiático por razones de trabajo.
Los jóvenes ven en el aprendizaje del idioma chino un complemento formativo que puede ampliar sus oportunidades de encontrar trabajo
En tanto, los jóvenes en busca de empleo ven en el aprendizaje de este idioma un complemento formativo que puede ampliar sus oportunidades de encontrar trabajo. CCC creó el curso hace dos años y lo imparte a distancia a través de internet. El 28% de los alumnos vive en Madrid y el 23% en Cataluña. El 14% es de Andalucía, el 13% de la Comunidad Valenciana y el 6% del País Vasco y de Canarias. De estos datos el centro concluye que sus alumnos se concentran en áreas donde hay grandes empresas que tienen negocios con China.
Pero, ¿qué tan complicado puede ser para un español aprender una lengua que no deriva del latín? 'No es fácil pero tampoco es todo lo difícil que uno se imagina', dice Yang Yung, la profesora del curso. Yung ha creado un método para españoles basado en un mínimo de 500 caracteres que considera suficientes para moverse con soltura en China. 'Parece mucho, pero para leer un diario chino necesitamos saber 1.800 caracteres y para llevar estudios universitarios necesitamos 4.000. Entonces dominar 500 caracteres no es inalcanzable', asegura. Y la prueba, añade, es que tras un año 'mucha gente está escribiendo muy bien'. Hay profecías autocumplidas.