La disposición del PNV despeja los Presupuestos
En política nada es lo que parece, de ahí que no quepa ver con asombro la intención del PNV de dar su apoyo al Gobierno para que pueda aprobar los Presupuestos estatales de 2009 que antes de fin de mes entrarán en el Congreso. El vicepresidente económico, Pedro Solbes, ya ha testado la buena disposición del nacionalismo vasco a respaldar las cuentas del año que viene, al tiempo que persisten las tensiones políticas entre La Moncloa y Ajuria Enea.
Las estrategias no se explican, sencillamente se aplican, afirma rotundo un veterano dirigente socialista poco partidario de airear las altas posibilidades que tiene el Gobierno de alcanzar un pacto presupuestario con el PNV. Fuentes de este último partido son más directas: 'Lo sensato es separar las tensiones políticas de los intereses económicos. Vamos a intentar llegar a un acuerdo con el Gobierno y ya estamos preparando al partido para ello'.
Las cartas tendrán que estar necesariamente boca arriba antes del 23 de octubre, fecha todavía no oficial en la que se prevé la celebración del debate de totalidad. Para entonces, el Gobierno tendrá que tener definidas sus alianzas parlamentarias para que no triunfe la enmienda de totalidad con la que el PP intentará que los Presupuestos sean devueltos al Consejo de Ministros.
La ventaja con la que parten el vicepresidente económico, Pedro Solbes, y el PNV en la negociación procede de que ambos tienen bien delimitado el terreno de juego que interesa a cada parte, gracias al fructífero diálogo mantenido en ejercicios anteriores. Después de que el año pasado Economía revisara la metodología para calcular el dinero que el Gobierno vasco debe pagar al Estado por las competencias que este último ejerce en Euskadi, Solbes firmó con Ajuria Enea una veintena de acuerdos que garantizan la paz en las relaciones financieras entre ambas administraciones, al menos hasta 2011. El Gobierno tiene identificadas también desde hace tiempo las preferencias del nacionalismo vasco en algunas de las partidas que más le afectan, entre ellas la participación del País Vasco en las dotaciones financieras que el Estado destina a la ley de Dependencia, a cubrir la ley Orgánica de Educación y a financiar la sanidad. Consta también en Economía el interés del PNV en aumentar las inversiones en infraestructuras para dar un empujón a la Y vasca, así como en incrementar los fondos para I+D+i. Solbes ya ha tomado nota de todo ello en un encuentro mantenido con el portavoz de Economía del PNV, Pedro Azpiazu, junto al diputado Josu Erkoreka, uno de los políticos nacionalistas más pragmáticos y racionales que han pasado por Madrid.
Igual que hace un año no afectó a la negociación presupuestaria con el Gobierno la sustitución de Josu Jon Imaz por Íñigo Urkullu al frente del PNV y la deriva independentista reeditada por el lendakari Juan José Ibarretxe, en esta ocasión también las tensiones políticas volverán a separarse de los condicionamientos económicos. Al menos, es lo que esperan las dos partes, a pesar de que la cita con las urnas en el País Vasco, prevista para el primer trimestre de 2009, añada algo de incertidumbre a esta carta de intenciones.
CALENDARIO NO OFICIAL
Una vez que el proyecto de Presupuestos entre en el Congreso antes de fin de mes, entre el 7 y el 9 de octubre tendrá lugar el desfile de altos cargos para explicar su contenido y entre el 21 y el 23 de octubre se desarrollará el debate de totalidad, en el que se tendrán que retratar las fuerzas políticas. Entre el 4 y el 6 de noviembre el proyecto se debatirá en comisión antes de su aprobación en pleno y su envío al Senado. El calendario aún no es oficial.
El PSOE pondrá difícil a CiU justificar el rechazo al proyecto
La firme intención del vicepresidente Pedro Solbes de cumplir las previsiones del Estatuto catalán respecto a las inversiones estatales en esta comunidad puede terminar poniendo difícil a Convergència i Unió (CiU) justificar su rechazo a los Presupuestos de 2009. Es lo que se opina en la dirección del Grupo Parlamentario Socialista, donde ya se han previsto reuniones con el resto de los grupos parlamentarios para conseguir que el proyecto de ley sea aprobado con holgura. En estos contactos con los partidos minoritarios se implicará también de lleno la vicepresidenta primera, María Teresa Fernández de la Vega. El Bloque Nacionalista Gallego, con dos diputados, está más predispuesto que otros a votar a favor de los Presupuestos, entre otras razones porque gobierna con el PSOE en Galicia y ésta va a ser una de las comunidades que van a resultar más beneficiadas en las cuentas de 2009. Las elecciones regionales están previstas en marzo.
Acceso del nacionalismo a la representación institucional
La buena disposición del Gobierno a separar sus profundas diferencias con el lendakari Juan José Ibarretxe respecto al futuro del País Vasco del necesario entendimiento institucional va a facilitar la presencia del PNV en el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) y, previsiblemente, también en la Comisión Nacional de la Energía (CNE), cuya renovación se encuentra en lista de espera.Los nuevos 20 vocales del CGPJ serán elegidos este mismo mes una vez se haga pública la sentencia contra Acción Nacionalista Vasca que, previsiblemente, le impedirá concurrir a las próximas elecciones autonómicas. Con posterioridad, se renovará el Tribunal Constitucional, paso sobre el que también se ha alcanzado ya un acuerdo con el PP.En la CNE serán sustituidos en breve los cuatro consejeros que fueron elegidos en su día a propuesta del PP: Fernando Marti, María del Carmen Fernández Rozado, José Sierra y Javier Peón.