Semillas más rentables
Agricultura. Conseguir la mayor productividad posible del campo es el reto fundamental de las explotaciones agrarias si quieren lograr rentabilidad. Ese objetivo es el que persigue Zeta Seeds, dedicada a mejorar las semillas
La agricultura necesita cada día mejorar su rentabilidad. En los últimos meses los productores han asistido a la paradoja que supone, por ejemplo, que los precios de los tomates hayan subido mucho para el consumidor pero el agricultor no está percibiendo ese incremento. Las explotaciones agrarias deben, por tanto, recortar cada vez más sus costes para lograr un beneficio claro y eso se consigue aplicando desde nuevas técnicas de producción a la incorporación de nuevas variedades que aporten un valor añadido.
En la agricultura, como en otros campos en los que el producto final es perecedero, el valor añadido llega por distintas vías. No se trata sólo de que la nueva variedad sea más atractiva para el consumidor. Hay otros elementos clave: la resistencia a determinadas inclemencias climatológicas, barreras a plagas o enfermedades, mayor duración que permite un mejor transporte, o que la misma planta sea capaz de producir más.
A localizar las variedades que recogen todas esas exigencias se dedica Zeta Seeds, una empresa creada por José Ángel Hurtado (en la imagen de la derecha), ex empleado de una multinacional del sector que decidió hace ocho años emprender una aventura en solitario. 'Primero empezamos comercializando productos de terceros pero pronto nos dedicamos a investigar y a producir las semillas que surgen de nuestros laboratorios', explica.
La empresa valenciana destina el 10% de sus ventas a la investigación de nuevas variedades de hortalizas
Zeta Seeds, con sede en la localidad valenciana de Benifaió, pero con instalaciones de investigación en varias localidades de Andalucía y Murcia, se dedica, por tanto, a realizar programas de mejora genética de varios tipos de hortalizas, como tomates, pimientos, pepinos, lechugas o melones. 'Se trata de mejoras por el método clásico de cruce de variedades', especifica Hurtado, para dejar claro que no se trata de transgénicos. 'Es el cruce que se produce de forma normal en la naturaleza, aunque en este caso se realiza en el laboratorio', señala. Con este sistema, Zeta Seeds testa hasta 3.000 variedades al año. Se realizan los cruces con la participación de los responsables de la parte más compleja del proceso, genetistas y patólogos, fundamentalmente. Estos estudios suponen una fuerte inversión económica, el 10% de la facturación, que el año pasado ascendió a 8,5 millones de euros. 'En este apartado contamos con la participación del CDTI (Centro para el Desarrollo Tecnológico Industrial), lo que nos ha permitido crecer más', señala Hurtado.
Pero ésta es sólo la primera parte del proceso. Cuando se realizan los cruces, los nuevos vegetales se plantan en los huertos experimentales que tiene la compañía, ya sea en Murcia, para las variedades que se cultivan al aire libre, o en Almería, para las que se crían en invernaderos.
Cuando ya se ha comprobado que la variedad es la buscada y, especialmente, se ha seguido de cerca su comportamiento en el campo, entonces es cuando llega el momento de producir, porque no hay que olvidar que lo que vende Zeta Seeds son las semillas para los agricultores, no los productos. Para lograr obtener, por tanto, estas simientes de las nuevas variedades, la producción se realiza en el extranjero. En concreto, la empresa produce en Chile, China y Vietnam, dependiendo de la especie de que se trate. El motivo es sencillo de entender. Para realizar estas producciones se necesitan grandes extensiones de campos de cultivo que en España sería demasiado costoso.
'Normalmente, la venta de las semillas se realiza a empresas de viveros que son los que realizan la germinación, un proceso especialmente delicado y clave, ya que una semilla que no germine en un porcentaje, aunque sea muy bajo, será rechazada por los productores', señala Hurtado. Zeta Seeds alcanza casi el 100% de germinación en sus semillas, según afirma su director general. Los agricultores suelen comprar finalmente las pequeñas plantas de esos viveros y plantarlas en los huertos. Las mejoras mencionadas al principio, ya sean porque determinada variedad de tomate produce el fruto unas semanas más tarde, lo que permite llegar al mercado fuera de los plazos de mayor oferta, o que una planta sea capaz de producir más pimientos que su predecesora, harán decantarse al agricultor por estas nuevas variedades. Incluso en algunas especies se apuesta por reducir su tamaño, como ha ocurrido con pimientos o sandías, para hacerlas más atractivas para el consumidor.
'Zeta Seeds investiga al mismo nivel que cualquier multinacional del sector', afirma con orgullo Hurtado, pero marca una diferencia clave. En los últimos años, las críticas a las grandes empresas por su afán por patentar sus hallazgos e impedir el uso de los avances de forma generalizada ha creado una corriente crítica de la que él mismo participa. 'No me gusta el comportamiento de algunas grandes compañías en ese campo', apunta Hurtado. De hecho, su empresa no registra sus descubrimientos y confía en que las ventajas que aportan sus nuevas variedades serán apreciadas por los agricultores que repetirán a la siguiente campaña, si les ha ido bien.
El futuro de la compañía es seguir creciendo, especialmente en el segmento exterior, de donde ya viene más de la mitad de su facturación. Las zonas más interesantes para colocar su producto son aquellas en las que el clima es similar al de tipo mediterráneo, ya que su investigación se centra en esta clase de cultivos, ya sea Portugal, Israel o Australia. En Europa, además, la compañía tiene una filial en Italia, participada con un socio local, que atiende a los mercados de Grecia, Croacia o Malta, que registran crecimientos importantes. Turquía o Marruecos son países en los que espera consolidarse en los próximos años. Y el salto a Brasil o México es uno de los objetivos inmediatos.
Pero además, el futuro también pasa por aportar más valor añadido a sus nuevas variedades por la vía de los componentes saludables que tengan. Así, la mayor presencia de antioxidantes, por citar un ejemplo, en una determinada variedad de hortaliza puede hacerla más atractiva para el mercado y, por tanto, más rentable para el productor agrario. Todo sin alterar la línea de cruce natural de variedades, algo que los agricultores conocen. Antes casi se daba por casualidad por la polinización cruzada de especies en el campo; ahora, se hace en el laboratorio.
Datos básicos
LiderazgoPese a enfrentarse a grandes multinacionales y tener sólo ocho años de vida, Zeta Seeds aspira a liderar el mercado de semillas. Sus previsiones de crecimiento para los próximos años están por encima de los dos dígitos, con especial fuerza en los mercados exteriores. En la actualidad está presente en 17 países.InvestigaciónLa clave para alcanzar esa posición reside en la confianza que pueda lograr de los agricultores, que son al final los que comprueban que las nuevas variedades son más rentables que las anteriores. Para conseguir estas nuevas variedades, la compañía cuenta con una plantilla de 47 trabajadores, desde investigadores hasta responsables de los campos experimentales. Cada variedad nueva que se estudia tiene a un director de desarrollo.SedeEl fundador de Zeta Seeds es un andaluz afincado en Valencia desde pequeño. La empresa tiene la sede social en Benifaió, los campos de experiencias en distintas zonas de España, especialmente Andalucía y Murcia, y el almacén logístico en Barcelona. Una multilocalización que, según José Ángel Hurtado, no supone ningún inconveniente.ProductosTrece tipos de hortalizas distintos, desde el apio al tomate, pasando por la cebolla o la sandía, tiene Zeta Seeds en su catálogo de semillas. Dentro de cada una de estas familias, hay, además, hasta cuatro variedades distintas.