Software canario de vocación global

Progreso. Lo que en 1994 era un proyecto empresarial de seis socios hoy es Microfusión, un grupo 100% insular de soluciones informáticas con 400 empleados. La compañía, participada por el gurú Ram Bhavnani, acaba de extender su actividad hasta India

En el año 1994 seis socios trabajadores fundaban la empresa Microfusión Informática. En ese momento, con todas las esperanzas puestas en sus ideas, nada les hacía prever que trece años más tarde formarían el grupo Microfusión tras unirse con General de Software de Canarias. La compañía resultante es de capital 100% canario, cuenta ya con más de 400 empleados y espera alcanzar una facturación superior a los 14 millones de euros.

Pese a las dificultades propias de los comienzos, el tesón y las ganas de hacer algo diferente llevaron a Microfusión al éxito. De su primer reto -consolidar una empresa dedicada a la tecnología- han pasado a su nuevo objetivo: 'Queremos liderar el sector tecnológico en Canarias desde la colaboración, no desde la competencia', explica el director general de la compañía y uno de los fundadores, Luis Cabeza.

El punto de inflexión se produjo a finales de 2007 cuando CajaCanarias unía su sociedad participada General de Software de Canarias a esta empresa privada. La unión que no hubiera sido posible sin Ram Bhavnani. El gurú de las finanzas afincado en las islas participó, a través de Casa Kishoo, en la conformación del grupo con un 15% del capital, mismo porcentaje de participación que la entidad financiera. De esta forma, se abría un nuevo horizonte para esos seis socios que un día decidieron arriesgarse.

Tanto Luis Cabeza como Delfino Marrero, este último presidente del grupo y también socio fundador, tienen muy claro el camino que ha de llevar la empresa para llegar al éxito. Afirman que su triunfo empresarial, es algo tan sencillo como que la empresa forma parte de la vida de sus empleados. 'Generar equipo es lo más importante, además de aportar nuevos retos para el personal', aseguran. Una filosofía que han trasladado desde la empresa predecesora, Microfusión Informática, hasta el nuevo grupo industrial. Sostienen que lo más importante es generar productos que puedan ser vendidos varias veces y en todo el mundo, y cambiar la mentalidad tanto del empresariado como de la administración con respecto a la I+D+i. 'Esta es la única industria en la que las características del Archipiélago no son un inconveniente, sino todo lo contrario, puesto que el modelo salva los obstáculos del transporte y del territorio', aseguran. En la actualidad han extendido su actividad a la India, donde 28 empleados producen software para proyectos liderados desde Canarias, una prueba más de la inexistencia de fronteras en este tipo de mercado.

Una firma de confianza

El grupo tecnológico lo conforman Microfusión y General de Software; Sinergia de 3, fundada por Microfusión como complemento en el campo de los suministros de equipamiento, seguridad, comunicaciones y gestión de licencias, entre otras áreas; y Castilla Consulting, con sede en la Península para la implantación de sus productos de forma nacional; además de pequeñas empresas que se han adquirido o con las que se ha empezado a colaborar, puesto que nunca subcontratan.

Si en un principio Microfusión se dedicaba fundamentalmente a ofrecer sus productos al sector del transporte, hoy no solo abarca otros segmentos, como el sector servicios, sino que también ha pasado de trabajar con el sector privado, en un 80%, a introducirse en el sector público a través de General de Software. Su organización pasa por empezar a colaborar o incluso integrar empresas pequeñas de todas las islas, de manera que se vayan generando productos que, a su vez, son mejorados por cada cliente y adaptados a las necesidades particulares, lo que propicia que un mismo software pueda ser utilizado por varias empresas en todo el mundo.

La diferencia entre este grupo y otros del sector es el mercado al que se dirige. Según cuentan, hasta ahora las empresas que han sobrevivido son las que se han especializado en un sector vertical, pero Grupo Microfusión ha conseguido abrir su actividad a varios sectores gracias a las herramientas que ya han creado. Esta forma de ver el trabajo es la que les ha llevado a fidelizar clientes en un porcentaje mucho mayor. Normalmente, en este tipo de empresas los clientes no son continuos. Pero ellos han conseguido mantener su cartera de compradores a lo largo del tiempo, con diferente facturación pero presentes en la mayor parte de los ejercicios.

Junto a estos retos, el grupo se ha marcado otro objetivo: la creación de un gran centro de datos para todas las empresas que lo requieran, estén donde estén, además de para los organismos públicos que lo necesiten. Así, y pese a que están construyendo un edificio para instalarlo y hacerlo crecer, ya hay empresas, tanto locales como extranjeras, que lo están utilizando. 'Tenemos una empresa de Cabo Verde en nuestro data center y esperamos que la demanda aumente', asegura Delfino Marrero. De esta forma, Microfusión ha dejado de ser una pequeña empresa para establecerse como un gran grupo corporativo con productos cada vez más diferenciados en el sector tecnológico.

Datos básicos

LAS EMPRESAS. Además de Microfusión y General de Software, las empresas que conforman el grupo tecnológico son: Sinergia de 3; Castilla Consulting, con sede en la Península para cubrir las necesidades tecnológicas de la península Ibérica; una empresa fundada en la India como filial, la cual posee algo más de 20 empleados; y algunas pequeñas empresas que se han adquirido o con las que la firma ha empezado a colaborar si la necesidad de compararlas.CONSEJO. Desde la formación del grupo Microfusión a finales del pasado año, el consejo de administración de dicha compañía está formado por un consejero de Casa Kishoo y otro de CajaCanarias. Por otra parte, trabajan en la compañía Eduardo de la Cruz, Delfino Marrero, como presidente del grupo, y Luis Cabeza, en el puesto de director general.ACTIVIDADES. Entre las actividades realizadas por el grupo Microfusión se encuentran la prestación de servicios de consultoría, desarrollos informáticos a medida, venta de productos propios, así como mantenimiento de software. Dentro de sus nuevos proyectos destaca la creación de paquetes de dinamización para el sector turístico.ÁREA DE ACCIâN. La unión que formalizaron a finales del pasado año las empresas Microfusión y General de Software de Canarias supuso la apertura al sector público de lo que pasó a llamarse Grupo Microfusión. Desde sus inicios, la empresa se dedicó a trabajar en el sector privado, ya que el 80% de su volumen de negocio procedía de él. Al principio, fueron las empresas de transportes las que más demandaron sus servicios. Actualmente han extendido su área de influencia en diversos sectores hasta el punto de crear un data center para empresas y organismos públicos.