Los magnates tecnológicos mutan en grandes inversores
Gates, Dell, Ellison, Case o Bezos destinan 13.600 millones a proyectos dentro y fuera del sector.
Seesmic, una de las tecnológicas de moda por sus aplicaciones de blogging a través de vídeos, anunció hace unas semanas la entrada en su capital y en su consejo de Pierre Omidyar, fundador de Ebay. Con la operación, el directivo se unía a Janus Friis y Niklas Zennström, fundadores de KaZaa y Skype. Es sólo el último ejemplo de una carrera iniciada años atrás por los grandes magnates del sector de la tecnología, que se han transformado en grandes inversores en otras compañías, tanto de esta industria como fuera de ella.
Las cifras son más que considerables. Estos empresarios, a través de sus llamados brazos de inversión, han destinado más de 21.000 millones de dólares (unos 13.600 millones de euros) a este tipo de proyectos, ajenos a las compañías creadas por ellos mismos.
Por volumen, sin duda, Cascade Investment de Bill Gates, Vulcan de Paul Allen, Eagle River Investment de Craig McCaw y MSD Capital de Michael Dell han sido los que más recursos han destinado. Y hay ejemplos de su ambición, las inversiones de McCaw, considerado el magnate del móvil en EE UU, han sido claves para proyectos como Clearwire, compañía que ha diseñado la mayor red de tecnología Wimax de EE UU. También Dell invirtió cerca de 100 millones en Red Hat mientras que Gates se convirtió en uno de los accionistas de referencia de la televisión mexicana Televisa.
Claro que, no son los únicos. En los últimos meses, otros magnates del sector han destinado parte de sus fortunas a invertir en compañías de software o de internet, relacionadas con la llamada web 2.0. El citado Omidyar, a través de su brazo de inversiones Omidyar Network (fundado junto a su esposa) se ha convertido en accionista de referencia de empresas de moda como la red social Digg, el motor de búsqueda en internet Wikia (creado por los fundadores de Wikipedia) o Linden Lab, la compañía que ha impulsado Second Life. En esta compañía, Omidyar (que todavía posee un 13,5% de Ebay) ha coincidido con Jeff Bezos, el fundador de Amazon. El empresario, a través de su sociedad de inversión Bezos Expeditions, también ha destinado fondos a Kongregate, especializada en juegos; la comunidad social Pelago; o la popular red social de microblogging Twitter.
Otros protagonistas del sector que están buscando un nuevo éxito son los citados Niklas Zennström y Janus Friis. A través de su sociedad financiera Atomico Investment, han invertido en torno a 400 millones de euros en empresas como la citada Seesmic, la firma de seguimiento climatológico Weatherbill o Fon, la comunidad Wifi fundada por Martin Varsavsky. Atomico ya ha tenido este año un gran éxito al vender su participada LastFM (una de las mayores comunidades sociales dedicadas al ámbito musical) a CBS por cerca de 280 millones de dólares.
Apuesta por Facebook
Y si Zennström y Friis han tenido varios éxitos en sus apuestas, Peter Thiel, ex consejero delegado de PayPal, no quiere ser menos. Su fondo The Founders Fund (en el que han entrado otros empresarios del sector tecnológico) ha destinado en torno a 50 millones de dólares a 23 start ups. Entre ellas, destacan sin duda, Facebook, la mayor red social del mundo por número de usuarios, y LinkedIn, comunidad social destinada a directivos y profesionales. De momento, los comentarios de los expertos son positivos para Thiel ante las millonarias valoraciones que se hacen de ambas compañías: 15.000 millones de dólares para Facebook y 1.000 millones para LinkedIn.
Sin duda el inversor quiere repetir el éxito de PayPal, vendida a Ebay por 1.500 millones. Un triunfo al que aspiran la mayor parte de los magnates del sector, pero que no es fácil de repetir. De hecho, muchos como Gates, Bezos o Dell siguen siendo accionistas de referencia de las empresas que fundaron y en la que se siguen asentando sus fortunas personales.
La pasión de Ellison por el software
Larry Ellison, fundador de Oracle, es un apasionado del software, al haber apadrinado a algunas de las empresas más revolucionarias de este ámbito. Ellison se convirtió a principios de la década en accionista de referencia de Salesforce, uno de los grandes proveedores de aplicaciones empresariales a través de internet. La firma, que se ha revalorizado un 352% en Bolsa en los últimos cuatro años hasta alcanzar una capitalización de 8.500 millones, podría ser objeto de una opa por parte de como Google y Microsoft. El interés por el software llevó a Ellison a pagar casi 100 millones por un 61% de Netsuite, especializada en aplicaciones de gestión bajo demanda. Aquí no ha tenido tanta suerte, desde la salida a Bolsa, las acciones han caído más de un 40%.