El rescate de sociedades con fondos públicos 'no sería presentable'

El coordinador y portavoz de Economía del Grupo Popular en el Congreso de los Diputados se mostró ayer acorde con la decisión del Gobierno de no salir al rescate, vía crédito del ICO, de la inmobiliaria Martinsa-Fadesa. 'Desde luego, no soy partidario de utilizar fondos públicos para el rescate de empresas', explicó. 'Hay cosas que no son presentables en un país serio, y no tendría sentido dejar que se cierre una pequeña empresa en dificultades para luego salir al amparo de una gran firma del mismo sector. Estas intervenciones no tienen ningún sentido económico y suponen una forma de nacionalización, además prohibida por la Unión Europea. Creo que ni siquiera debería plantearse una posibilidad así', aseveró. Ayer, la cotización de Martinsa fue suspendida en la Bolsa de Madrid después de caer un 24%.

El portavoz popular explicó que el boom inmobiliario que terminó el año pasado surgió porque el saneamiento de las cuentas públicas 'convenció al mercado para reducir los tipos de interés'. Aunque el tipo de referencia era ya común al conjunto de la zona euro desde 1999, Montoro se refirió a la 'ausencia de prima de riesgo' frente a otros países. Además, explicó que el crecimiento económico 'facilitó la creación de empleo, y eso motivó la inversión en vivienda'. En ese momento, Montoro hizo una pregunta retórica: '¿Cómo va a ser ése un planeamiento gubernamental? Nosotros no planeamos el número de viviendas iniciadas. Fue un fenómeno muy positivo que permitió superar la crisis de 2001; luego, el boom inmobiliario fue denostado y criminalizado'.

Lo erróneo, a su juicio, 'es que el actual Gobierno no hizo nada. No será porque no se veía venir. Cuando hay ministros que dicen estar sorprendidos por la brusquedad de la caída, yo no lo comparto, porque la verdad es que no faltaba ni un elemento'. A esos 'elementos' se unió la crisis financiera originada en Estados Unidos y la duplicación del precio del petróleo. 'Yo lo que critico es que, a partir del boom, se aproveche para hacer operaciones financieras de apalancamiento. Pero, si no hay árbitro en el partido, los jugadores juegan a todo', añadió.

Mayor deducción por vivienda

El que fuera ministro de Hacienda en el Gobierno de José María Aznar reclamó el aumento de la deducción por vivienda habitual desde el 15% hasta el 25% de lo invertido en amortización más intereses, hasta un límite que también aumentaría desde los actuales 9.015 euros hasta los 10.000. Preguntado sobre si ello incentivaría la creación de futuras burbujas, Montoro afirmó que 'Nadie decide comprarse una casa por la deducción. Sería una ayuda limitada, que favorecería sobre todo a grupos de edad joven con dificultades para hacer frente a la subida de tipos de interés'.

Laboral. Hacia una reforma como la de 1997

Si se cumplen las previsiones y se destruyen 1,6 millones de empleos adicionales a los 500.000 ya destruidos, esta será la peor crisis de la historia económica de España. Dejando claro que esa previsión ha sido realizada por la patronal CEOE, Montoro dejó claro ayer la gravedad de la situación económica, a juicio del Partido Popular. Por ello, reclamó la realización de una nueva reforma laboral, porque 'el gobierno socialista no ha hecho prácticamente nada' en ese sentido. Así, el portavoz popular en el Congreso propuso una reforma 'en la línea de la realizada en 1997', con el primer Gobierno de José María Aznar. 'Se trataría de fomentar la contratación estable, no de apoyar la temporal', explicó, aludiendo a una posible segmentación del mercado laboral. Ese año, se introdujo un nuevo 'contrato estable', en el que la indemnización por despido quedaba fijada en 33 días por año trabajado, en lugar de los 45 habituales en los contratos fijos.

Energía. Más empresas para evitar acuerdos sobre precios

Cristóbal Montoro desgranó ayer una amplia lista de quehaceres que, a su juicio, mitigarían el impacto de la crisis. Liberalización de mercados, aumento de competencia y reformas en varios ámbitos, como el de la energía: 'Hay que llegar a un mercado con un número de empresas suficiente para que no sea fácil llegar a acuerdos tácitos sobre precios'. El economista popular afirmó que su partido apuesta por las energías renovables, y propone mantener la producción actual de energía nuclear.Montoro exigió 'recuperar la credibilidad' de los organismos reguladores, que, a su juicio, sufren de un exceso de intromisión política. Además, propuso una ley de unidad de mercado e incentivos a la colaboración público-privada en infraestructuras.