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Inmigración

Plan alemán para atraer mano de obra cualificada

El Gobierno aprobará medidas para impulsar la atracción de trabajadores extranjeros cualificados.

La competencia entre países por el talento global ya ha empezado. En Alemania faltan ahora mismo 400.000 expertos. Y la escasez de mano de obra cualificada cuesta al país más de 20.000 millones de euros al año, según cálculos de su Ministerio de Economía. Para resolver las necesidades actuales de talento global y anticiparse a los problemas demográficos del mañana, el Gobierno de Berlín quiere gestionar mejor la entrada de cerebros foráneos en Alemania. El ministro de Trabajo, Olaf Scholz, y el del Interior, Wolfgang Schäuble, han preparado un paquete de medidas para garantizar la disponibilidad de trabajadores cualificados. El nuevo concepto de gestión de los flujos migratorios de talento se aprobará a lo largo de este mes.

Pero el socialdemócrata Scholz y el democristiano Schäuble no quieren dejar ningún cabo suelto en un asunto tan delicado para la opinión pública alemana como la emigración. Por esta razón, se creará un gremio de expertos y un índice de las necesidades reales de trabajo cualificado, elaborado a partir de una encuesta mensual para conocer la fluctuación laboral de la economía alemana. El objetivo es disponer sólo del talento extranjero que el mercado precise. Será un índice similar al del barómetro IFO de Múnich (en que se consultan cada mes a 7.000 empresas alemanas) que permitirá determinar con precisión la demanda de trabajo cualificado en los meses siguientes.

El nuevo concepto de gestión de talento implica también un golpe de timón en la apertura del mercado laboral alemán al talento extranjero. Para ello se reducirá el límite de ingresos mínimos necesarios para obtener un permiso de residencia. Actualmente un extranjero debe ganar más de 86.400 euros anuales para obtener sin problemas un permiso de trabajo. En el futuro, sus ingresos deberán superar los 63.300 euros al año para poder quedarse en Alemania. La medida ha sido ya aplaudida por el presidente de las Cámaras de Comercio e Industria, Ludwig Georg Braun, quien considera que 'brinda una oportunidad de contratar extranjeros cualificados a las pequeñas y medianas empresas.'

Por otro lado, el Gobierno sabe que este tipo de planes provoca miedos. Sobre todo, entre los 3,1 millones de personas sin empleo. La propuesta de Scholz y Schäuble es demorar hasta el último momento posible la entrada de ciudadanos del Este al mercado de trabajo. Hasta el año 2011, los trabajadores no cualificados de los nuevos países miembros de la UE no podrán acceder libremente al empleo en Alemania. Una medida con la que se pretende evitar el descontento de los trabajadores alemanes ante la competencia de la mano de obra barata del este. Aunque el riesgo de caer en la pobreza es aún inferior en Alemania que en la mayoría de países europeos, existe el miedo, en especial en los Estados del este de Alemania. Ese riesgo afecta por ahora al 13% de los alemanes, mientras que en España el porcentaje se eleva al 20%.

Pero la locomotora alemana necesita una ingente cantidad de académicos. El nuevo concepto del Gobierno alemán abre completamente las puertas a licenciados universitarios de todo el mundo (también de los nuevos países miembros de la UE). Eso sí: con una condición. Sólo podrán acceder a un puesto si no hay ningún candidato alemán que pueda ejercer ese trabajo. En contrapartida, no se les pagará menos que a un ciudadano de la República Federal.

Permiso a los que ganen 7.200 euros

Cerebros globales, sí; trabajadores no cualificados, todavía no. Ese es el lema que presidirá el paquete de medidas que el Gobierno alemán aprobará en los próximos días para gestionar de forma más eficaz los flujos de talento extranjero. ¡Bienvenidos los académicos y trabajadores preparados!Ambos colectivos son necesarios para cubrir el déficit de mano de obra cualificada (400.000 en 2008 y 500.000 en 2013, según el Ministerio de Economía alemán).Hasta ahora la fórmula para atraer talento consistía en entregar el permiso de residencia a quien lograra hacerse con un puesto cualificado con una retribución de 7.200 euros brutos (3.800 euros netos) mensuales.Un límite absurdamente alto y ampliamente criticado por la prensa especializada, sobre todo teniendo en cuenta que en Alemania se considera rico a quien gana 3.418 euros netos al mes, según el último informe anual de la pobreza elaborado por el Gobierno alemán.Las nuevas medidas ideadas por los ministros Scholz y Schäuble podrían facilitar ahora la entrada en Alemania a los ingenieros y los técnicos de países del este europeo que hasta no tenían otro remedio que emigrar a Irlanda o a Suecia.En cualquier caso, el plan evidencia la preocupación de la economía germana por gestionar el futuro de su talento. Hoy faltan 400.000 especialistas. Y ¿mañana? Pues, según los expertos, todavía más.Más aún teniendo en cuenta la fuerte necesidad de mano de obra cualificada que demandarán a corto plazo las multinacionales alemanas, cuyas plantillas siguen creciendo con fuerza. Sólo en 2007, la compañía farmacéutica Schwarz Pharma generó 90.000 puestos de trabajo, seguida por el fabricante de neumáticos Continental y la tecnológica Siemens, con 66.430 y 29.700 empleos creados.

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