La CMT da más libertad a Telefónica en telefonía fija
Telefónica tendrá total libertad para fijar sus tarifas y lanzar ofertas de telefonía fija e incluso podrá reducir el precio de la cuota de abono, aunque para subirla tendrá un tope máximo que seguirá fijado por las autoridades. Al menos, ésa es la propuesta de nueva regulación que ha lanzado a consulta pública la Comisión del Mercado de las Telecomunicaciones (CMT). El regulador ha terminado el estudio del mercado de telefonía fija en España y ha llegado a la conclusión de que hay suficiente competencia como para que Telefónica tenga más libertad de movimientos.
Su informe se ha repartido ahora entre los integrantes del sector, que tendrán un mes para presentar sus alegaciones a la propuesta. También la Comisión Nacional de Competencia (CNC) tendrá que hacer un informe. Con todo eso en la mano, la CMT redactará su propuesta de medidas y la enviará a la Comisión Europea, para que haga sus comentarios. Sólo después de este proceso, se aprobará la resolución definitiva.
Cambios hacia la apertura
El nuevo escenario que prevé la CMT para la telefonía fija en España presenta algunos cambios con respecto a la situación actual. Por ejemplo, Telefónica tiene libertad para fijar sus precios de las llamadas, pero debe presentar sus ofertas de voz al regulador antes de lanzarlas para que la CMT las estudie.
Con la propuesta, Telefónica podrá evitarse esta consulta previa y sus precios quedarán sujetos sólo a las normas de competencia, como el resto de los sectores no regulados.
Otro cambio es la liberalización de la cuota de conexión. En estos momentos, el precio por solicitar el acceso a la línea telefónica cuesta 59,5 euros y lo fija la CMT. Cuando se apruebe la medida, Telefónica podrá decidir el precio.
Lo más importante, sin embargo, es la cuota de abono, el pago mensual por tener línea telefónica. La CMT seguirá decidiendo cuál es la subida máxima que puede acometer Telefónica, pero será sólo en forma de tope, porque esta compañía podrá bajar el precio.
La CMT, en cambio, ha decidido mantener la obligación de Telefónica de permitir a sus rivales interconectarse con su red.