Los forjadores del cambio

En la década de los setenta ya comenzaba a despuntar una nueva generación de empresarios que estaban trabajando en la modernización de España. La entrada en nuevos negocios y la internacionalización eran la clave

Javier Benjumea. Abengoa. Protagonismo en la industria andaluza

Nace en Sevilla en 1915. A los 27 años fundó Abengoa, que presidió y dirigió hasta su jubilación para prestar una 'especial' atención en los últimos años a la Fundación Fondo de Cultura. Se ocupó de la nacionalización y constitución de la Compañía Española de Minas Río Tinto, de la que también fue presidente, y, después de la fusión de ésta con Unión Española de Explosivos, fue nombrado, primero, presidente de la comisión ejecutiva, y, más tarde, vicepresidente de la nueva sociedad, Unión de Explosivos Río Tinto. Fundador de Cementos del Sur, presidió esta cementera hasta su fusión con Asland. Estuvo presente en múltiples consejos de administración: Sevillana de Electricidad y Banco Urquijo o Hispano. También presidió Altos Hornos. Murió en Sevilla en diciembre de 2001.

Juan Lladró. Porcelanas Lladró. Dos generaciones al frente del grupo

El fabricante de las conocidas figuritas de porcelana fue fundado por tres hermanos: Juan, José y Vicente, que llevaron directamente la gestión de la compañía hasta 2003. La segunda generación siguió adelante con la sociedad bajo la presidencia de Juan Vicente Lladró, hijo mayor de Vicente. La primogénita de Juan, Rosa Lladró, se hacía cargo de la presidencia de Lladró Comercial e inició la transformación de la compañía. El año pasado, tras 53 años de gestión conjunta, la familia dividió el negocio. Juan Lladró y sus cuatro hijas pasaban a controlar el negocio de porcelanas (Lladró y Nao) y el de joyería, con Carrera y Carrera. El resto de los activos, fundamentalmente ligados al negocio inmobiliario, serían para los otros hermanos.

Enrique Bernat. Chupa Chups. La innovación al servicio del negocio

Enrique Bernat Fontlladosa fundó Chupa Chups en 1957, tras fabricar y poner a la venta el primer caramelo con palo. La vocación exterior de esta empresa familiar, asturiana de nacimiento y con sede en Cataluña, se inició ya en los años setenta, con exportaciones a Alemania, Italia, Estados Unidos, Japón y Australia. En la década siguiente vino el establecimiento de filiales comerciales en Estados Unidos, Reino Unido y Alemania. El paso definitivo llegó en los noventa: Chupa Chups se introdujo en los mercados emergentes, abriendo filiales comerciales e industriales en Rusia, China, México y Brasil. Tras dejar la gestión de la empresa a finales de la citada década, en 2006 la compañía pasó a manos del grupo italo-holandés Perfetti Van Melle. Falleció en 2003.

Tomás Pascual. Leche Pascual. La calidad como lema de la empresa

Tomás Pascual (Aranda de Duero, 1927-Madrid, 2006) se inició en el comercio ayudando a su padre en la cantina de la estación local. El gran grupo empresarial que luego constituiría comenzó su andadura en 1969, cuando Pascual se hizo cargo de una pequeña cooperativa lechera en quiebra que pasó a denominarse Industrias Lácteas Pascual. Fue pionero en introducir en España, durante los años setenta, la uperisación de la leche y el envasado en tetrabrik. También, en el año 1980, el grupo lanzó las primeras leches desnatadas y semidesnatadas del mercado. Además de su conocida marca de leche, el grupo comercializa otras como el agua Bezoya o los zumos Zumosol, líder del sector en España. La compañía factura en torno a 1.600 millones de euros.

Ramón Areces. El Corte Inglés. A la cabeza de la distribución

Ramón Areces (Grado, Asturias, 15 de septiembre de 1904-Madrid, 30 de julio de 1989) fue precursor, junto a su primo Pepín Rodríguez, fundador de Galerías Preciados, de la nueva distribución textil a través del concepto gran almacén. A partir de una sastrería especializada en confección infantil, monta su imperio de distribución. Tras la Guerra Civil, compra un edificio en el número 3 de la calle Preciados, a escasos metros de la Puerta del Sol, donde crea el primer centro del grupo. Allí inicia la venta por departamentos, un modelo comercial anglosajón hasta entonces desconocido en España. La expansión geográfica y de oferta llega en los sesenta, cuando comienza a distribuir alimentación y productos de limpieza. El Corte Inglés es actualmente el primer grupo de distribución del mercado español.

José M.ª Aristrain. Aristrain. Una fortuna basada en el negocio siderúrgico

José María Aristrain es guipuzcoano, tiene 46 años y es uno de los herederos de una familia vinculada a la siderurgia desde la primera mitad de la década de los cincuenta. Cuando contaba 24 años, tuvo que hacerse cargo de la gestión de la floreciente compañía que había fundado su padre, después de que éste falleciese en un accidente de aviación. Aunque participa en más de una veintena de empresas de los sectores más variopintos, buena parte del crecimiento de su fortuna se ha debido a los movimientos corporativos en la industria siderúrgica. A mediados de los noventa decidió vender la empresa familiar al grupo Aceralia por un importe de 250 millones de euros. Cobró en acciones de la compañía compradora, que luego se integraría en Arcelor. En 2006 jugó un papel decisivo en la opa lanzada por Mittal sobre el grupo europeo, al inclinarse por aceptar la oferta del magnate indio. Hoy, el valor de aquellos títulos se acerca a los 1.000 millones.

José M.ª Escondrillas. ERT. Reestructurar industrias como forma de vida

Ingeniero industrial, su vida profesional se inició en la fábrica de Luis Olarra, como la de muchos ingenieros industriales vascos de las promociones finales de los cincuenta. Con 28 años, Escondrillas ocupaba el cargo de director de fábrica, con 2.000 trabajadores a su cargo, y allí tuvo su primera experiencia en reestructurar industrias. Aceros de Llodio sería la segunda de sus experiencias en empresas industriales con problemas. La Naval de Reinosa, General Eléctrica Española o Ensidesa serían las siguientes. A finales de 1976, tras pasar por Ensidesa, crea la consultora Check, especializada en la reestructuración de industrias. Check trató crisis tan variadas como las de Babcock & Wilcox, La Farga, Palmera, Isodel Spretcher o la línea blanca de los electrodomésticos. En enero de 1983 accede a presidir el principal grupo industrial privado del país, Explosivos Río Tinto (ERT). Dimitió en 1987, tras la entrada del grupo kuwaití KIO en el capital de Cros, matriz de ERT.

José Serratosa. Valenciana de Cementos. El patriarca de una estirpe empresarial

En 1917, el patriarca José Serratosa Nadal creó los cimientos de la que sería la mayor cementera española. Durante el franquismo vendió buena parte del cemento de los años del desarrollo hasta situarse como una de las principales firmas de su sector en Europa. En los años ochenta, los hijos, José y Emilio, asumieron las riendas del negocio. A finales de esa década, los Serratosa protagonizaron un batalla contra Mario Conde por el control de la empresa, que se saldó con un acuerdo estratégico con la noruega Aker (tomó el 24,8% del capital), que libraba a la cementera española del intento de control de Banesto al sumar su paquete al de los Serratosa (21%) y el 4% de la familia Garnica. En 1992, los Serratosa cerraban con Aker un negocio redondo, la mexicana Cemex compraba sus participaciones por 125.000 millones de pesetas en la que fue, en aquellos momentos, la mayor opa de la historia española. Ahora han articulado sus negocios en torno a Nefinsa y Air Nostrum.

José Antolín. Grupo Antolín Irausa. El primer fabricante de componentes español

El Grupo Antolín Irausa, radicado en Burgos, fue fundado por José Antolín y su hermano Evelino. La compañía mantiene su carácter familiar, pero ha dado entrada, con un 20% del capital, a cinco cajas de ahorros desde hace un año. Es el primer fabricante español de componentes para el automóvil, su facturación supera los 2.000 millones de euros y está presente en 18 países con 60 plantas industriales, algunas de ellas en China. Casi el 70% de la cifra de negocio corresponde a las filiales extranjeras. Antolín se extiende por el mundo entero siguiendo los pasos de sus clientes, que por orden de importancia son Grupo Volkswagen (que representa casi un cuarto del negocio), Ford Motor (23,8%), Renault-Nissan (23,2%) y General Motors (8,5%). El 53% de los productos que fabrica están relacionados con los techos del automóvil; el 36%, con las puertas, y el 11%, con los asientos. La política de externacionalización de las firmas ha dado alas al crecimiento de los fabricantes de componentes.

Francisco Rubiralta. Celsa. Entre el alambrón y el diagnóstico clínico

Francisco Rubiralta (Manresa, 1939) y su hermano José María, tres años menor, comparten al 50% la propiedad del grupo Celsa y CH Werfen. Francisco dirige la firma siderúrgica mientras que de la empresa hospitalaria se encarga José María. El pilar del acero nació en 1967, cuando los dos hermanos crearon, en Sant Andreu de la Barca (Barcelona), la Compañía Española de Laminación (Celsa). Con sólo 26 años, Paco, como llama su familia a Francisco, acababa de llegar de Pittsburg (Estados Unidos), la ciudad del acero, con un posgrado en la prestigiosa universidad Carnegie Mellon bajo el brazo. Dos años más tarde compraron Izasa, especializada en la distribución de material técnico hospitalario. Hoy se llama CH Werfen y constituye la matriz de un grupo internacional especializado en equipos para diagnosis clínica. En 2006, los dos hermanos decidieron repartirse los negocios y encargaron valoraciones para hacer el traspaso de las participaciones.