'Las relaciones bilaterales rompen la Constitución'
Gregorio Peces-Barba nunca ha querido estar lejos de los estudiantes. Tampoco ahora que ya ha cumplido 70 años y no es rector de la universidad que puso en pie, la madrileña Carlos III. Da clases de Derecho en primero y quinto curso y sigue atento desde su minúsculo despacho la actualidad política. Para Peces-Barba, la deriva nacionalista es una disfunción del Estado que el Tribunal Constitucional debe corregir.
¿La España de 2008 es la España que usted imaginó hace 30 años?
No es que yo sea un optimista como el Cándido de Voltaire, pero el punto de partida era tan negativo, la dictadura era tan mediocre... Sin duda, todo lo que ha venido después ha sido mejor. Hemos logrado establecer unas reglas del juego políticas, a través de la Constitución; se han establecido también unas reglas del juego económicas, a través de las relaciones entre sindicatos y empresarios; hemos conseguido que España tenga un papel relevante en el ámbito internacional y hemos sido capaces de establecer una sucesión pacífica en el poder. Pero es verdad que la libertad también ha tenido sombras: el terrorismo y la corrupción.
Las relaciones bilaterales no son naturales, son propias de un Estado confederal'
¿El modelo económico tiene encaje en la Constitución? ¿Respeta la economía social de mercado?
La legislatura anterior corrigió algo los desequilibrios. Las leyes sociales han sido un progreso importante en este campo. En cualquier caso, hay una enorme diferencia entre la forma de actuar del PP y el PSOE, sobre todo en educación y sanidad. El PP ha hecho proliferar los centros concertados.
Sus impulsores fueron los socialistas...
Los conciertos no se pueden tocar porque están en la Constitución, pero no deberían tener el peso que ahora tienen en ciertos territorios como Madrid. Tampoco se debe favorecer la separación en la escuela de los niños y las niñas. El Tribunal Supremo ha señalado que no es inconstitucional que los niños y las niñas estén separados, pero yo creo que sí lo es. Es contrario al espíritu de la Constitución. El Estado debería poder oponerse a las subvenciones. Por eso, creo que es necesaria una ley que regule los conciertos. Ahora, el PP está intentando trasladar esa misma actuación al ámbito universitario, con una de las mayores perversiones que hay, que es el cheque escolar
¿Se han dado poderes excesivos a las comunidades autónomas? ¿Hay que recuperar competencias?
Es muy difícil. Habría que cambiar la Constitución, y en este momento no es posible. Yo creo que sería bueno para la educación y para el urbanismo. La educación tiene dos problemas. Una interpretación conservadora de la educación, y luego la nacionalista, donde se están realizando demasiadas rupturas.
¿España es un Estado federal?
Funcionalmente sí, pero históricamente no. Es funcionalmente federal porque tiene la organización federal de competencias compartidas, pero algunos pasos que se han dado en los nuevos estatutos, con Cataluña al frente, rompen ese esquema, y potencian relaciones bilaterales.
¿Y qué consecuencias tiene eso?
Pasar, no va a pasar nada, pero es una disfunción. Yo no soy catastrofista, pero es una escalada de a ver quién puede conseguir más. No se va a destruir España, pero las relaciones bilaterales apuntan a un Estado confederal, que en ningún caso es el español, el que pactó la Constitución, ni es el que desean la mayoría de los españoles. O bien esa disfunción se ajusta por sí sola o bien el Tribunal Constitucional tendrá que corregirla.
No parece que vaya a hacerlo...
No lo sé. Aunque al presidente Montilla le parezca natural, la bilateralidad no es normal, es propia de un Estado confederal.
¿Qué encaje tienen dentro de España los territorios de Cataluña, Navarra y el País Vasco?
El actual. España lleva unida 500 años, es impensable la fragmentación del Estado.
¿Cómo hay que reformar la Ley Electoral?
La Constitución dice que tiene que haber entre 350 y 400 diputados; nos quedan, pues, 5o. Yo no soy partidario de repartirlos, sino de hacer, como en Alemania, una circunscripción nacional única. Debe impedirse que haya una de los nacionalistas.
También hay que modificar los acuerdos con la Iglesia...
Hay que denunciarlos y promover la separación real entre Iglesia y Estado. La Constitución señala que ninguna confesión tendrá carácter de estatal. Además, es necesario que la Iglesia Católica esté regulada por la legislación española, por la Ley de Libertad Religiosa.
Dedicación docente. Las obsesiones de un viejo profesor de Derecho
A Gregorio Peces-Barba (Madrid, 1938) el título de padre de la Constitución española (junto a Fraga, Pérez Llorca, Solé Tura, Herrero de Miñón, Roca y Gabriel Cisneros) le acompañará de por vida. Pero detrás de este catedrático de Filosofía del Derecho hay mucho más. Hay un activista contra la dictadura en su calidad de abogado de los acusados por el Tribunal de Orden Público. Hay un intelectual que formó parte de la redacción fundacional de la revista Cuadernos para el Diálogo, crucial para entender los últimos años del franquismo. Y hay, sobre todo, un profesor universitario obsesionado por formar jóvenes licenciados en la excelencia y el Derecho. Principalmente a través de su gran obra, la creación en 1989 de la Universidad madrileña Carlos III, de la que ha sido rector hasta el mes de abril del pasado año. Y todo ello aderezado con una actividad política incesante. Primero, como diputado socialista en las Cortes constituyentes, y después, como presidente del Congreso, tras la aplastante victoria socialista de 1982. Ahora acaba de recibir la medalla de honor de la universidad y el reconocimiento de sus colegas. Tres palabras recorrieron las jornadas de homenaje: ética, poder y Derecho. No fue por casualidad.