FedEx y Northwest mandan al hangar más de cien aviones
Las aerolíneas reducen su capacidad por el crudo
El transporte aéreo, ya sea de bienes o de pasajeros, sigue contra las cuerdas por la subida del precio del crudo y en EE UU muchas de las empresas del sector están mandando a cientos de aviones al hangar para así reducir capacidad y costes. Las últimas en anunciar esta medida fueron Northwest y United Airlines.
Ejecutivos de esta última aerolínea dijeron ayer que van a reducir entre un 13% y un 14% de su capacidad, eliminando de su flota de 416 aviones a 100 de ellos. Los recortes van a pasar factura a la plantilla que verá perder hasta 1.600 efectivos.
Para esta compañía, que ha intentado de forma infructuosa buscar una fusión con otra para reducir costes, el precio del crudo no deja otra opción. La aerolínea cuenta con que en 2008 su factura de combustible llegue a los 9.500 millones de dólares (6.127 millones de euros), es decir, 3.500 millones de dólares más que el año pasado.
Por su parte, Northwest volverá hacer un segundo recorte de capacidad antes de que acabe el año. Esta compañía, que ha pactado su fusión con Delta, retirará 14 Airbus y Boeing de su flota antes de fin de año y alrededor de 30 DC más. En total, la compañía eliminará casi el 10% de su capacidad.
American Airlines, Continental, US Airways y Delta ya habían anunciado antes similares medidas además de otras destinadas a aumentar la facturación como el recargo en el transporte de las maletas de los viajeros o el recargo en asientos con más espacio. Jetblue, unas de las aerolíneas más populares de bajo coste, está considerando abrir una sección llamada Premium en sus vuelos que hasta ahora sólo eran turista.
La factura de FedEx
La factura del combustible también ha complicado las cuentas de FedEx, una compañía que ayer presentó unas pérdidas correspondientes a su cuarto trimestres de 421 millones de dólares (271,5 millones de euros). La caída se debió, sobre todo, a los costes extraordinarios de absorción de la cadena de tiendas Kinkos con la que se hizo hace cuatro años y que ahora está reorganizando.
Si los resultados fueron malos, peores fueron las perspectivas que esta empresa presentó al mercado por el mal momento de la economía americana y los altos precios del crudo. '2009 va a ser un año muy difícil', dijo ayer su consejero delegado, Alan Graf. Para hacer frente a este ejercicio, FedEx va a cerrar algunas operaciones, introducir vehículos híbridos en su flota de transporte terrestre y aparcar aviones de forma temporal.