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Gestora de infraestructuras

Concessia abre su capital a la entrada de nuevos socios financieros

Concessia, gestora e inversora en infraestructuras controlada por cajas de ahorros, tiene prevista la entrada en su accionariado de nuevos socios procedentes del mundo financiero. Con 100 millones para sus primeras operaciones, prevé cerrar 2008 con dos proyectos, tras lo que vendrán ampliaciones de capital.

El primer semestre de vida de Concessia, constituida en febrero por 13 cajas de ahorros y la firma de gestión y control de procesos de diseño y construcción Gerens Hill, se ha dedicado a la presentación del proyecto a empresas e instituciones públicas. A partir de aquí, lanza sus operaciones sabedora de que es un socio apetitoso en los proyectos medianos de concesión de infraestructuras, en los que oferta capital y conocimiento.

La compañía analiza ya distintas oportunidades en España con el fin de cerrar un par de inversiones, de entre 50 millones y 100 millones de euros cada una, antes de que concluya 2008. Concessia busca participaciones relevantes, entre el 20% y el 50% del capital de esos proyectos, y está trazando alianzas con constructoras medianas para acudir a concursos e incluso promover privatizaciones.

Sus responsables aseguran que se descartó hace unas semanas participar en un concurso internacional de gran volumen. Tres fueron los motivos: 'No queremos ser meros socios financieros, los megaproyectos se escapan de nuestro foco inversor y los accionistas quieren que las primeras actuaciones estén localizadas en el mapa español', explica el consejero delegado de Concessia, José Manuel Albaladejo, en una entrevista concedida a CincoDías.

Los primeros 100 millones de capital, en proceso de desembolso por parte de los socios, servirán para la irrupción en un sector de gigantes liderado por firmas como Abertis, Cintra o Itínere. A partir de ahí, las inyecciones de capital vendrán por la vía de la incorporación de nuevos accionistas y el plan de negocio, a diez años vista, contempla la salida a Bolsa, pero sólo cuando lo permitan las condiciones del mercado y el negocio esté maduro.

Albaladejo habla -sin citar nombres- del interés de nuevas cajas de ahorro y fondos de inversión extranjeros, pero las ampliaciones de capital esperarán a que los actuales partícipes traspasen sus aportaciones y a que surjan oportunidades de inversión: 'No queremos disponer de capital ocioso, pero estamos abiertos a nuevos socios siempre y cuando no se pierda el carácter financiero de Concessia'. Esto es invitar a cajas y bancos, firmas de capital riesgo o fondos de inversión.

35 concesiones en 2018

En diez años Concessia prevé participar en 35 concesiones en España, EE UU, Europa del Este, México, Brasil y Chile, por un valor de 2.000 millones de euros. Pero sus primeros pasos, incide el primer ejecutivo, se darán aquí: 'Perseguimos la rentabilidad, pero las Cajas buscan que su negocio revierta en el beneficio de la sociedad y eso implica que trabajemos principalmente en España y con altos cánones de calidad'.

La diferencia entre Concessia y sus rivales es la independencia respecto a una constructora. Pero su perfil financiero no implica que deje en manos de otros la gestión de las concesiones o que rechace la necesaria alianza con el mundo de la construcción: 'Sin despreciar ningún potencial compañero de viaje, nuestro aliado objetivo es la constructora mediana', afirma José Manuel Albaladejo.

La otra vía de crecimiento que entra en los planes de la sociedad es la toma de posiciones en el capital de otras sociedades concesionarias: 'Nuestra vocación es de participación a largo plazo, por lo que somos un buen sustituto de accionistas que quieran abandonar concesiones una vez puestas en marcha'.

En un contexto de escasa liquidez en el mercado, Concessia cuenta con todo un seguro de vida: son las propias cajas de ahorro las que han pedido encabezar las futuras operaciones de financiación, especialmente en aquellas obras cercanas a su ámbito de actuación.

Más que explotar carreteras

Los fundadores de Concessia son Gerens Hill y un grupo de trece cajas: Caja Vital Kutxa, Caixa Sabadell, Caja Sur, Caja Insular de Canarias, Caja Ávila, Caja Mediterráneo, Caja Rioja, Caja Badajoz, Caja Murcia, Caja Burgos, Caja Círculo, Ibercaja y Sa Nostra.

La entidad nació en febrero con 100 millones de capital. Su reto es participar en concesiones por 2.000 millones en los próximos diez años.

Concessia está atenta a oportunidades en el campo de los equipamientos públicos, desde hospitales o residencias de la tercera edad, hasta aeropuertos y carreteras.

En su estrategia también se contempla proponer privatizaciones de infraestructuras a la Administración.

La compañía huye de comparaciones con los fondos de inversión. Uno de sus fines es facilitar la participación de las cajas de ahorro en el mercado de la financiación privada de infraestructuras, pero su vocación pasa por tener un papel en la gestión de las concesiones.

En su esquema operativo figura la financiación de los proyectos aportando un 15% o 20% de capital propio, mientras afronta alrededor del 80% del presupuesto con financiación externa, como suele ser regla básica en el sector concesional.

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