Los productores de hormigón ven peligrar el 14% de su empleo
La crisis por la que atraviesa el sector de la construcción está pasando factura a todas las actividades auxiliares y uno de los segmentos que más se está viendo afectado es el de la producción de hormigón. Las empresas pertenecientes a la Asociación Nacional Española de Hormigón Preparado (Anefhop) denunciaron ayer que el 14,2% de su empleo directo peligra por la caída del consumo de este producto, que en el primer trimestre fue del 15% anual y estiman que podría acabar el año con una merma del 20%.
El director general de Anefhop, Javier Martínez de Eulate, explicó que si el descenso de la actividad constructora persiste, entre 4.000 y 5.000 personas que se dedican a la fabricación y transporte de hormigón perderán su puesto de trabajo en un año, lo que representa el 14,2% de los 35.000 empleos directos del sector.
Concentración
En cuanto a la viabilidad de las empresas, Martínez de Eulate pronosticó que deberán ajustarse a la nueva situación, por lo que no descartó algunas operaciones de concentración. Es más, aseguró que, dadas las dificultades por las que atraviesan en la actualidad las compañías, 'probablemente el 50% esté en venta'.
A la crisis se le une el hecho de que las empresas sufren unos plazos de pago muy elevados, de media de hasta 210 días. 'Una situación que puede llegar a ser trágica si las empresas constructoras acuden a procesos de suspensión de pagos o caen en quiebra, con lo que quedarían descubiertas grandes cantidades de dinero sin pagar', añadió. Anefhop estima que el dinero que adeudan en la actualidad las constructoras y administraciones a todos los proveedores de la construcción puede ascender al 3% del PIB.
Sustituir el asfalto de las carreteras
Los fabricantes de hormigón aseguran que el aumento de la licitación de obra civil no está compensando el parón registrado en el sector residencial. Por ello, van a pedir a las administraciones públicas que estudien la posibilidad de construir las carreteras con este material y sustituir así el tradicional aglomerado asfáltico.Consideran que es más económico de mantener y más duradero, aunque su primera implementación resulta más cara. Argumentan que el hormigón no es un producto inflacionario, al no depender del petróleo, es más ecológico y es de producción nacional, por lo que no se paga con divisas.