El Ibex pierde el 13.000 con euríbor y crudo disparados
La posibilidad de un alza de tipos en Europa provoca una escalada vertical del petróleo y lleva al Ibex a caer un 5% y perder los 13.000 puntos en la peor semana desde enero.
El Ibex concluyó la semana de una manera inesperadamente negativa. El índice cedió el viernes un 2,49%, en la que representa su mayor caída en una sesión desde mediados de marzo. El selectivo español concluyó en 12.909,8 puntos, perdiendo así la referencia técnica de los 13.000 puntos. La Bolsa se encuentra en su nivel más bajo desde mediados de marzo. Fue una jornada muy negativa, en la que sólo un valor, la especialista en derivados sanguíneos Grifols, logró terminar al alza (0,75%). En cambio las pérdidas abundaron y de qué manera. Ferrovial cedió un 4,57%; Acciona, un 4,52%; Iberia, un 4,46%; Inditex, un 4,13% y Popular, un 3,67%, por citar algunos ejemplos.
El índice ha perdido un 5,08% en una semana que ha sido la peor desde mediados de enero. El Banco Popular ha encabezado los números rojos, con un retroceso del 9,06%; Iberia se dejó un 8,53%; ACS, un 7,7% y el banco Sabadell, un 7,54%. Pese a ello, aún hubo algunos valores que premiaron a los que supieron apostar por ellos. Fue el caso de Endesa, que mejoró un 3,8% al calor de la subida de las tarifas eléctricas y también Grifols (2,49%), que se beneficia de su sólida posición en un negocio nada cíclico: el suministro de hemoderivados como el plasma.
Aunque el castigo ha sido notable en toda Europa, el índice español se ha llevado la palma. El Euro Stoxx 50 ha caído un 4,64%; el Cac 40 de París, un 4,37%; el Dax de Fráncfort, un 4,13% y el Footsie de Londres, un 2,42%.
La sacudida ha tenido lugar en el tramo final, entre el jueves y el viernes. El BCE ha elegido la semana de su décimo aniversario para dar una mala noticia a los inversores. La entidad monetaria ha presentado un cuadro muy positivo de la actividad económica de la zona euro, cuya crisis podría estar tocando suelo. Con una presión inflacionaria extraordinaria, los miembros del banco central creen que se acerca el momento de encarecer el precio del dinero, actualmente al 4%. El presidente del BCE, Jean-Claude Trichet, dejó caer el jueves que existe esa 'posibilidad'.
La reacción del mercado ha golpeado de lleno en la línea de flotación del bolsillo de los consumidores. La tasa euríbor (Euro Interbank Offered Rate) a 12 meses, la que se utiliza como referencia para la hipotecas a tipo variable, subió el viernes hasta el 5,418%. Es el nivel más alto de su historia. Pero hay un dato incluso más relevante. Durante nueve años, el euríbor o tasa de interés interbancaria, ha seguido muy de cerca la evolución de los tipos de interés oficiales. Esa relación comenzó a romperse el verano pasado y ahora el diferencial (spread) entre el euríbor y el precio que marca el BCE también está en récord: 1,418 puntos porcentuales.
Esta brecha contrasta aún más con el promedio de los 10 años de vida del euríbor, que es de sólo 0,373 puntos porcentuales. La desconfianza entre los bancos hace que la prima exigida para prestar dinero en el mercado interbancario sea cada vez más alta y la consecuencia es que, diga lo que diga Trichet, el mercado ya le está subiendo los tipos a los ciudadanos.
Otras dos reacciones inmediatas han sido el avance del euro hasta superar los 1,574 dólares por unidad y el avance en vertical del crudo, más de 11 dólares en dos días. La cotización del barril de Brent volvió a romper el viernes la barrera de los 130 dólares y marcó un nuevo máximo histórico en 137,69. De esta manera, la epidemia de la inflación vuelve a extenderse sobre la totalidad del tejido productivo, poniendo en peligro tanto los márgenes empresariales, como el gasto de los consumidores.
Nuevos problemas en EE UU
Por si el panorama no fuera suficientemente negativo en la eurozona, desde Wall Street llegó el viernes la noticia que el desempleo está en el nivel más alto desde el año 2004 y, peor todavía, que ha registrado el incremento mensual más rápido desde 1986. Para terminar de apuntalar el desánimo, el paro entre los jóvenes está en su peores números desde 1948. En la economía europea tiene un gran peso la exportación; en EE UU, sin embargo, el gasto de los consumidores equivale a dos tercios del PIB.
La reacción en Wall Street no se hizo esperar. El Dow Jones cedió un 3,13%; el Nasdaq, un 2,96% y el S&P 500, un 3,09%. Poco ayudó a temblar los nervios la previsión de Morgan Stanley, de que el petróleo alcanzará los 150 dólares en un mes, cuando la temporada veraniega dispare el consumo de carburantes. La cotización del crudo responde a innumerables factores. A la indudable presión de la demanda, sobre todo desde Asia, se une la actividad de los especuladores, que en un mercado tan tenso como el actual cobran la fuerza suficiente como para tumbar el precio o llevarlo hasta nuevos récords.
El pánico hizo que por primera vez desde el huracán Katrina (2005) volviese a hablarse del límite máximo de fluctuación del petróleo en el mercado Nymex, que es de 10 dólares por barril. En cualquier caso, es importante resaltar que no ha sucedido ninguna noticia de calado, salvo el dato del paro, que no incentiva precisamente el consumo. Eso significa que la fuerte caída de Wall Street puede darse la vuelta a velocidad de vértigo. El petróleo también puede recorrer el camino inverso al de este viernes con idéntica rapidez.
Lo que atenaza al parqué
Tipos. El BCE dejó el jueves abierta la posibilidad de un alza de tipos -ahora al 4%- y el mercado lo recogió ipso facto. El euríbor a 12 meses pulverizó el viernes récords e hipotecas: subió un 5,7%, el mayor ascenso una sola sesión, e hizo un nuevo máximo histórico: 5,418%.Paro. Los datos de desempleo en EE UU encendieron la alarma este viernes: la tasa de paro llegó en mayo al 5,5%, la cifra más alta desde 2004. El aumento fue de nada menos que de medio punto porcentual, el más alto desde 1986. El panorama empeora.Inflación. Es una combinación peligrosa: menos actividad y precios más altos. En un año, el IPC de la zona euro ha pasado del 1,9% al 3,3%. En España, del 2,4% al 4,7%, según el dato adelantado de mayo, el máximo desde que comenzó a elaborarse el IPC armonizado, en 1997.Petróleo. La cotización del barril de Brent no deja de dar disgustos. El precio del crudo ha subido un 80% en 12 meses y más de un 400% en los últimos años. La reacción del mercado a la intención del BCE de subir tipos hizo que el barril ganase 10 dólares en dos días.