La Caixa, Iberia y Repsol, principales acreedores de Air Madrid
Air Madrid tiene como principal acreedor a La Caixa, a quien debe 25,03 millones de euros por un préstamo, lo que supone el 17,03% de las deudas acumuladas por la aerolínea, declarada en concurso necesario de acreedores después de que el Ministerio de Fomento le retirara la licencia.
Según el informe de los administradores concursales de Air Madrid, Iberia y Repsol también figuran entre los principales acreedores, aunque a larga distancia de la primera caja española, con 2,46 millones de euros contraídos con la aerolínea y 2 millones con la petrolera.
A continuación figura el ente público Aeropuertos Españoles y Navegación aérea (AENA), con 1,75 millones de euros; el Banco Popular, con 1,74 millones y la Agencia Tributaria, con 1,18 millones de euros.
Los administradores concursales han considerado que el Ministerio de Fomento debe estar en la cola de las posibilidades de cobro, ya que han calificado de contingentes subordinadas las deudas de 6,49 millones contraídas con el departamento, que tuvo que fletar aviones para transportar a los viajeros que se quedaron sin volar tras la suspensión de la licencia de Air Madrid.
Según la clasificación actual de acreedores, el convenio anticipado propuesto por el propietario de Air Madrid, José Luis Carrillo, podría salir adelante, ya que ha recibido el apoyo de acreedores que representan casi el 50% del pasivo, entre ellos de La Caixa, de acuerdo con fuentes jurídicas.
Otros grandes acreedores no han dado de momento su visto bueno, como es el caso de Fomento, cuya aprobación podría ser vital en el caso de que los administradores concursales modifiquen la califiación de los importes que debe la aerolínea al departamento dirigido por Magdalena Alvarez.
Respaldado por la actividad hotelera de su grupo, Carrillo ha prometido devolver en un año el importe completo de los billetes de avión de los clientes que quedaron en tierra y en cinco la mitad de las deudas contraídas con las empresas.
Dudas sobre la viabilidad del plan de rescate
A juicio de los administradores concursales nombrados por el juez que tramita el concurso, las "expectativas más razonables" para que los acreedores sean compensados pasan por aprobar el convenio anticipado, aunque mantienen sus reservas sobre la viabilidad del plan presentado.
Los administradores cuantifican los activos de Air Madrid en 25,5 millones de euros, lo que permitiría pagar el 17,6% de las deudas de la aerolínea, fijadas provisionalmente en 144,5 millones.
El Ministerio de Fomento retiró la licencia de funcionamiento a Air Madrid en diciembre del 2006, después de que esta aerolínea incurriera en repetidos retrasos e irregularidades en sus vuelos, dejando a miles de personas en tierra con los billetes comprados en plenas vacaciones navideñas.
Poco después, el bufete IURE Madrid instó el concurso necesario de acreedores de la aerolína, una petición que fue aprobada por el Juzgado Mercantil número 5 de Madrid.