Excelencia medioambiental
Nos preocupa el medio ambiente y las noticias alarmantes sobre el calentamiento global, la pérdida de biodiversidad, la destrucción de bosques tropicales, la escasez de agua y comida, el escaso éxito de la lucha contra la pobreza, el crecimiento de la población, etcétera, y las fuentes de información son cada vez menos sospechosas de crear alarmismo injustificado.
El Panel Intergubernamental sobre el Cambio Climático, reunido en Valencia el 17 de noviembre de 2007, presentó datos corroborados por científicos de todo el mundo. Asimismo, organismos internacionales como la FAO (Food and Agricultural Organization), UNDP (UN Development Programme), WMO (World Meteorological Organization), WHO (World Health Organization) aportan su conocimiento especializado. No hace falta ser un experto para entender que estos problemas se relacionan y potencian entre sí: a mayor población, mayores necesidades, mayores impactos para la naturaleza, mayor subida de temperaturas, mayor escasez de alimentos y agua; y se cierra un círculo reforzador del problema.
La solución es compleja, participan países con muy distinto grado de desarrollo e intereses y hay que tomar decisiones a corto plazo pensando en el larguísimo plazo.
En este Día del Medio Ambiente nos gustaría ofrecer a la sociedad nuestra visión optimista y creemos que realista, sobre cómo los principios de excelencia en gestión están dando muy buenos resultados en los problemas ambientales, tanto locales como globales.
Los principios de la excelencia en la gestión ambiental, que podríamos resumir en: estudiar los procesos de una forma sistémica profundizando en las causas y sus efectos; obtener mediciones precisas de contaminantes; tener planes y objetivos cuantitativos para combatirlos; facilitar una participación constructiva y racional de los distintos grupos de interés de forma que se consigan resultados equilibrados para todos, etcétera, están propiciando buenos resultados en problemas concretos en países de nuestro entorno. Somos testigos de cómo aplicando las tecnologías de depuración y los sistemas de gestión adecuados conseguimos limpiar nuestros ríos, mejorar la calidad del aire en muchas de nuestras ciudades, regenerar suelos que estuvieron contaminados y este verano podremos disfrutar de muchas playas casi inmaculadas.
Las empresas se sienten presionadas por la sociedad para cumplir los principios de excelencia en la gestión ambiental. Más de 129.000 empresas de 140 países se han certificado conforme a la norma internacional ISO 14001, para demostrar a sus clientes que han integrado en sus prácticas operativas los principios de excelencia de los que hablábamos. España, con un total de 11.125 certificados, mantiene desde hace dos años el primer puesto europeo y el tercero en la clasificación mundial en certificados, demostrando el respeto de las entidades españolas hacia el medio ambiente.
También en los problemas macro, los principios de excelencia han tenido aplicación. Como ejemplo, el éxito de la Unión Europea en el liderazgo mundial del combate contra el cambio climático, a través del Sistema de Comercio de Emisiones (EU ETS, European Union Emissions Trading Scheme), que ha sido capaz de organizar en muy poco tiempo un mercado de emisiones de gases de efecto invernadero, causa del calentamiento global. Con este sistema, la emisión de estos gases tiene un coste para las industrias, con lo que se consigue que éstas tengan un interés económico en reducir las emisiones. Es un sistema eficaz para reducirlas, al mínimo coste.
Estamos seguros de que los principios de excelencia en la gestión serán de aplicación en la resolución de los grandes problemas ambientales a los que nos enfrentamos. Quizás el más grave y crítico sea conseguir un acuerdo internacional sobre cambio climático, lo que se ha llamado pos-Kioto 2012, en el que participen los firmantes y al que se sumen EE UU, China e India.
Las Naciones Unidas deberán liderar las negociaciones para planificar objetivos cuantificables y verificables de mitigación de emisiones tanto para los países desarrollados como para los que están en vías de desarrollo, buscar financiación para promover la adaptación en los países más vulnerables al cambio climático, para incentivar la conservación de los bosques e impulsar el desarrollo y transferencia de nuevas tecnologías.
Los principios de la excelencia que promueve nuestro club entre las empresas españolas están siendo aplicados a la resolución de los problemas ambientales con éxito. Esperamos que sea un motivo de esperanza en este Día del Medio Ambiente.
Carlos Fernández Briones. Vicepresidente del Club Excelencia en Gestión y director corporativo de Medio Ambiente y Calidad de Iberdrola