La IATA asegura que la situación de las aerolíneas es 'desesperada'
Los malos augurios que rodean al sector aéreo internacional tuvieron ayer su confirmación en la reunión anual de la IATA en Estambul. El director general de la organización, Giovanni Bisignani, aseguró ayer que la situación de las aerolíneas es 'desesperada y destructiva'. Además, vaticinó unas pérdidas globales de 3.800 millones de euros para este año si el barril continúa en 135 dólares.
Ayer el petróleo parecía dar un respiro a las aerolíneas. Pasadas las tres de la tarde llegaba al mínimo registrado en 15 días hasta situarse en los 125 dólares por barril. Pero rebotó con fuerza y acabó la jornada en los 128 dólares. No es extraño, por tanto, que sus subidas y bajadas fueran el eje central de la asamblea de la Asociación Internacional de Transporte Aéreo (IATA, en sus siglas en inglés) que se celebra estos días en Estambul y que el director general de la misma haya bautizado al alza del petróleo como el quinto jinete del Apocalipsis, por detrás de la peste, el hambre, la guerra y la muerte.
En su informe anual, presentado en el encuentro de las aerolíneas con la asociación, la IATA aseguró que la actual situación de las aerolíneas es desesperada y más destructiva que el escenario dibujado tras en 11-S en el que se combinaron 'los cuatro jinetes del Apocalipsis'. Bisignani fue pesimista. Muy pesimista. Pero ya lleva tiempo augurando la difícil situación que ahora envuelve al sector aéreo. En 2004 alertó de que el alza del precio del petróleo podría añadir unos 634 millones de dólares mensuales a los gastos de las empresas aéreas. Estos pagos se han multiplicado por 14 desde entonces debido a la actual coyuntura y los gastos se traducen en unas pérdidas globales de 3.800 millones de euros en las empresas para este año si el barril de Brent continúa a 135 dólares (máximo que alcanzó el pasado 21 de mayo).
En el discurso inaugural de la 64 asamblea general anual, Bisignani señaló que por cada dólar de aumento de precio del petróleo los costes de las aerolíneas se incrementan en 1.600 millones de dólares (1.028 millones de euros). Partiendo del precio medio del petróleo de 107 dólares por barril en los cinco primeros meses del año, las pérdidas del sector se situarían en 2.300 millones de dólares (1.477 millones de euros) al cierre del ejercicio, cifra que en estos momentos parece demasiado optimista para el director de la IATA.
Oportunidades
Siguiendo el mismo esquema de escalada del precio del petróleo, la factura de queroseno supondrá 113.000 millones de euros, que se traduce en el 34% de los costes operativos de las compañías. Ante este escenario, con unas cifras tan poco alentadoras, Bisignani advirtió de que la industria necesitará más cambios urgentes para sobrevivir a la crisis. Sin embargo, el director de la IATA vio oportunidad en el actual escenario: 'Hace cuatro años, tras la crisis, nos marcamos el objetivo de modernizar nuestro negocio con una mejora tecnológica y de la eficiencia. Esta visión es ahora una realidad'.
El vaticinio de la IATA no sentó bien a las aerolíneas europeas. Las más perjudicadas en el parqué fueron las compañías de bajo coste. La aerolínea más importante en ese segmento, la británica Easyjet, registró una bajada del 5,15% quedando el precio de su acción en 285 peniques (3,6 euros). Le siguió la española Vueling, en pleno proceso de fusión con Clickair, que registró unas pérdidas del 5,06% hasta alcanzar los 7,31 euros.
Otras aerolíneas que tuvieron una caída en los mercados europeos fueron la franco-holandesa Air France-KLM, que registró una caída del 3,49% hasta los 16,59 euros y la alemana Lufthansa que perdió un 2,52% su valor hasta situarse en 16,25 euros. Iberia, por su parte rebajó su valor en la Bolsa de Madrid un 4,27% hasta los 2,02 euros por acción, su precio más bajo desde el 12 de septiembre de 2006.
En la reunión anual de la IATA, Fernando Conte, presidente de Iberia adelantó que la compañía española prevé un 'ligero' descenso del coeficiente de ocupación previsto para este año, aunque consideró que habrá que tener en cuenta la respuesta de los clientes ante el aumento de las tarifas que podría empezar a aplicarse de continuar la actual tendencia del precio del carburante.
Conte ya apuntó en la junta de accionistas de la compañía que con el precio del barril por encima de los 130 dólares, la situación para el sector es 'dramática' por lo que el impacto precio del crudo tendría que ser traspasado 'al menos en parte' al mercado.