El Real estrena 'La clemenza di Tito', de Mozart
El Teatro Real presenta hoy, el domingo y el martes próximo La clemenza di Tito, de Wolfgang Amadeus Mozart, estreno con el que el coliseo madrileño quiere establecer un puente de unión entre la primera y la última de las grandes óperas del compositor; esto es, entre el Idomeneo que cerrará la presente temporada, y La clemenza.
Con dirección musical de Víctor Pablo Pérez, muy vinculado a este título con el que ha obtenido grandes éxitos en los festivales Mozart de Madrid y A Coruña, y escena y figurines de Marco Carniti, esta nueva producción cuenta con un equilibrado reparto, con cantantes que han hecho de los papeles que interpretan en esta ópera uno de sus caballos de batalla. Es el caso de la mezzosoprano búlgara Vesselina Kasarova; de la temperamental soprano, también búlgara, Alexandrina Pendantschanska; o del tenor italiano nacido en Alemania Roberto Saccà. Junto a ellos intervienen dos voces españolas en ascenso, la mezzosoprano navarra Maite Beaumont y la soprano vasca Ainhoa Garmendia.
Estrenada en el Teatro Nacional de Praga el 6 de septiembre de 1791, Mozart llevaba ya diez años sin escribir óperas serias cuando, a finales del úiltimo verano de su vida, el empresario Guardasoni le encargó una obra para celebrar la coronación de Leopoldo II como rey de Bohemia. El tiempo que le concedió era limitadísimo: sólo cuatro semanas.
El compositor no tuvo libertad para elegir el libreto: se trataba de La clemenza di Tito, un drama escrito por Pietro Metastasio casi 60 años antes, en 1734, y reducido a verdadera ópera por el poeta del Elector de Sajonia, Caterino Mazzolà.
El libreto original glosa el triunfo de la bondad del emperador Tito, que acaba perdonando a todos los que han querido asesinarle. Los hilos de la maldad los teje con sus intrigas Vitellia, hija del emperador Vitellio, destronado por el padre de Tito, que procura vengarse y trama un complot para asesinarlo.
Pese a la rigidez del marco impuesto, el genio salzburgués supo imponerse y crear una obra llena de humanidad, con unos personajes que anuncian ya en sus conflictos la sensibilidad romántica. La clemenza di Tito se estrenó en España en el Liceu en 1963.