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Aeronaútica

Airbus retrasa de nuevo tres meses las entregas del 'superjumbo' A-380

El superavión A-380 sigue dando quebraderos de cabeza a Airbus. El fabricante aeronáutico anunció ayer un nuevo retraso de tres meses en el calendario de entregas diseñado inicialmente. La fabricación en serie de la aeronave se ha visto demorada ante la necesidad de contar con más tiempo y recursos de los previstos.

El programa del A-380, el avión de pasajeros más grande del mundo, vuelve a atragantársele a Airbus. 'No estamos ante un escenario catastrófico', aclaró ayer el presidente de la compañía, Tom Enders. Pero la realidad es que la filial de EADS ha tenido que corregir, de nuevo, el calendario de entregas del superjumbo en lo que supone el cuarto retraso de un proyecto que tiene sumido al gigante aeroespacial europeo en su mayor crisis desde hace dos años.

En rueda de prensa vía telefónica, la cúpula de Airbus anunció ayer que las entregas del A-380 se retrasarán entre dos meses y medio y tres meses frente a las estimaciones iniciales, lo que supondrá que el grupo dejará de facturar una quincena de aviones entre 2008 y 2010. Según los nuevos cálculos, la compañía hará llegar a sus clientes este año 12 aparatos frente a los 13 previstos; 21 en 2009, frente a los 25 estimados; y 'entre 30 y 40' en 2010, frente a los 42 que había planeado.

La demora tendrá un impacto financiero negativo sobre las cuentas del grupo (EADS presenta hoy sus resultados trimestrales) pero Enders no quiso ofrecer ninguna estimación. 'No es posible dar ninguna cifra en estos momentos, porque dependerá mucho de las conversaciones que mantengamos las próximas dos semanas con los clientes afectados', señaló.

En la actualidad, Airbus cuenta con 192 pedidos en firme por parte de 16 aerolíneas para hacerse con el A-380. Por ahora sólo ha entregado cuatro aparatos, que opera Singapore Airlines, cliente de lanzamiento. El responsable comercial de Airbus, John Leahy, afirmó que, pese al ajuste en los plazos de entrega, no espera que se vayan a anular pedidos.

Programa exigente

Según explicaron los directivos del grupo, el retraso se debe a que están necesitando 'más tiempo y recursos' de lo previsto para iniciar la producción en serie del avión. Los problemas de cableado que provocaron el gran retraso de dos años en el lanzamiento del A-380 han obligado a Airbus a terminar la fabricación de las 26 primeras aeronaves de forma individualizada, en un proceso que está absorbiendo más trabajadores y tiempo que lo pensado, lo que ha robado recursos a la siguiente fase de producción (la fabricación en serie).

Según Enders, los 26 primeros aviones estarán terminados en enero de 2009. En estos momentos ya hay 17 unidades en diversas fases de producción, sobre todo en las de instalación del cableado y prueba de sistemas.

Los responsables de la empresa aseguraron que la nueva organización de Airbus en centros de competencia no ha tenido que ver con los retrasos. En la misma línea, negaron que ciertos problemas que han sufrido con suministradores hayan sido decisivos en este sentido. 'Ha habido ciertas dificultades, pero son las habituales', puntualizaron.

El presidente de Airbus lamentó el nuevo contratiempo pero quiso dejar claro que los problemas que afectan ahora al A-380 no tienen nada que ver con los de 2006 ni ponen en juego el éxito comercial que, a su juicio, tendrá el avión. 'Se trata de un programa muy grande y exigente. Pero ya lo conocemos muy bien y sabemos lo que necesitamos', apostilló. La compañía considera que las aerolíneas demandarán 1.283 aviones del tamaño del A-380 en los próximos 20 años, un mercado que aspira a controlar en un 50%, según confirmó ayer Leahy.

LAS CIFRAS

3 meses es el retraso medio que sufrirán las entregas de los 'superaviones'.

15 aviones menos, aproximadamente, entregará Airbus entre 2008 y 2010 frente a lo que tenía previsto.

300 millones de dólares (194 millones de euros) es el precio oficial del A-380.

La venta de plantas se retomará a medio plazo

El número dos de Airbus y responsable operativo de EADS, Fabrice Brégier, confirmó ayer que el grupo mantiene sus planes de deshacerse de siete de sus 17 plantas en Europa pese al reciente fracaso de las conversaciones con los socios compradores. 'Mantenemos nuestro plan original, que cumpliremos en dos o tres años como máximo', subrayó.Además, quiso dejar claro que el hecho de que no puedan materializar la operación, de momento, no afectará a la marcha del programa del A-350, el nuevo avión largo alcance y capacidad media. 'Contamos con cash suficiente', afirmó.EADS anunció el año pasado su intención de desinvertir en media docena de sus fábricas europeas, en el marco del plan de ajuste puesto en marcha en su filial aeronáutica. Tras meses de evaluación, la empresa inició conversaciones exclusivas con la gala Latécoère, la británica GKN y la alemana MT Aerospace (filial del grupo OHB) para deshacer posiciones en sus fábricas. La idea era que, además, las tres empresas se convirtieran en suministradores de primer nivel de Airbus y en socios a riesgo compartido para el nuevo A-350.Sin embargo, los problemas de los potenciales compradores para lograr la financiación necesaria han obligado a paralizar la operación en cinco de las plantas. De momento, sólo se mantiene en los casos de la fábrica británica de Filton y de la alemana de Laupheim, cuya venta se cerrará 'en semanas'.

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