Grandes urbes vistas por sus ciudadanos
Un estudio destaca los problemas de cada capital
La vida en la gran ciudad está repleta de tópicos negativos: ruido, contaminación, agobio, masificación ¿Están de acuerdo sus habitantes? ¿Les gusta vivir en una capital o piensan que su calidad de vida deja que desear? Para responder a estas preguntas, Accenture ha realizado un estudio cualitativo que recoge la opinión de los ciudadanos sobre la labor de la administración pública en ocho ciudades del mundo: Madrid, Londres, Sidney, Singapur, Berlín, Nueva York, París y Los Ángeles.
Y el resultado es positivo: al menos el 60% de los entrevistados considera que su ciudad es un buen lugar para vivir y trabajar. La mejor de todas es Sidney, según el documento, con un elevado 89% que se declara muy satisfecho de su calidad de vida, seguida de Los Ángeles y Singapur. París (59%) y Londres (58%) cierran esta clasificación. En cuanto a la calidad de sus servicios públicos, los habitantes de Singapur son los más satisfechos (86%), seguidos de los madrileños (72%).
No obstante, los ciudadanos de Madrid se muestran críticos y destacan que aún queda mucho por hacer: el 70% considera que la situación de la capital española aún podría mejorar mucho. Para los madrileños, el principal problema que sufre la ciudad es el elevado coste de la vida (en línea con la opinión de Los Ángeles, Nueva York, París y Singapur), sobre todo el de la vivienda. Los bajos salarios, la inestabilidad laboral, la seguridad y el mal funcionamiento de la sanidad pública son las otras preocupaciones de quienes viven en Madrid. El sistema de salud también es la principal queja de los habitantes de Sidney, mientras que a los berlineses el asunto que les quita el sueño es el paro. Sólo Londres prioriza la delincuencia como su principal problema. En los aspectos positivos, los consultados valoran las posibilidades que ofrece la vida en una gran ciudad y la variada oferta cultural.
El estudio subraya que los ciudadanos desean que la administración les consulte más a menudo sobre la mejora de los servicios públicos. El 80% mantiene que deberían ser tratados con la calidad que reciben los clientes de una empresa, de una manera más transparente, veloz y eficaz. Eso sí, más del 50% no se declara dispuesto a pagar más impuestos para lograr un mejor servicio.