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Crisis financiera

El RBS despedirá a 7.000 empleados por la integración de ABN, según la prensa

El Royal Bank of Scotland (RBS) despedirá a un total de 7.000 empleados como parte del proceso de integración en su división de mercados globales del banco de inversión holandés ABN Amro, que adquirió el año pasado por 71.000 millones de euros a través de un consorcio en el que también participaron el Santander y Fortis.

Según adelanta hoy el Financial Times (FT), el banco, cuya plantilla total -incluido el ABN Amro- asciende a 28.000 personas, se ve presionado a actuar de forma ¢agresiva¢ en el proceso de integración debido a que la crisis crediticia mundial ha afectado en mayor medida al sector financiero.

Este recorte de empleo se produciría después de que el RBS anunciara la semana pasada su intención de llevar a cabo una ampliación de capital por valor de 12.000 millones de libras (15.192 millones, al cambio actual) para mejorar sus reservas, afectadas por la crisis y por la compra del ABN Amro.

El diario asegura que el banco se dirigirá a partir de este miércoles a los trabajadores que se encuentran en los niveles por debajo de la alta dirección para solicitarles información de su historial profesional, como parte de un proceso de consulta que durará entre cuatro y seis semanas.

El proceso de recorte de empleo incluirá la creación de un consejo integrado por trabajadores de todos los niveles que entrevistará a muchos empleados que tienen probabilidades de ser despedidos.

En las últimas semanas, varios altos directivos han salido del banco, entre ellos el encargado de los mercados de deuda, Justin May, y el de la división europea de ventas, Clive Roberts, que trabajará para la firma francesa Exane.

Presión por la crisis

El plan del RBS se produce como respuesta a una mayor presión sobre los bancos para recortar sus plantillas en Europa tras la crisis crediticia mundial.

Merrill Lynch comenzó la semana pasada una consulta para despedir a unos 500 empleados en Europa.

Analistas de JP Morgan pronosticaron hace unas semanas que la crisis crediticia va a costar a la City londinense (el centro financiero de la ciudad) unos 40.000 empleos este año, mientras que el Centro para la Investigación Económica y de Negocios prevé que los despidos alcancen las 11.000 personas este año y otras 8.200, en 2009.

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