BAA ralentiza el trabajo de la terminal 5 de Heathrow

'BAA reconoce que la inauguración de la terminal 5 del aeropuerto de Heathrow no ha sido tan satisfactoria como nosotros y British Airways hubiéramos deseado'. Con esta afirmación hecha pública el viernes por la filial aeroportuaria del grupo Ferrovial, la británica BAA, ha comenzado la toma de medidas consensuadas entre el gestor de la infraestructura y su usuario, la aerolínea British Airways.

El objetivo es evitar el colapso de la recién inaugurada terminal quinta del aeropuerto londinense y, de momento, ha sido aplazado hasta el mes de junio el plan de mover los vuelos de larga distancia, operados por la citada compañía aérea, de la terminal 4 a la 5.

Normalidad

BAA asegura que su instalación está funcionando 'sin problemas' desde el pasado martes. Pero reconoce que ambas firmas trabajan para 'prevenir que se produzcan nuevos problemas'.

Desde su apertura al público, el pasado 27 de marzo, la instalación ha registrado la cancelación de alrededor de 300 vuelos. Los problemas han estado relacionados, principalmente, con el sistema de chequeo de las maletas. Unas 15.000 han sido entregadas a sus propietarios con retraso. La aerolínea asumió desde el primer momento su responsabilidad en las cancelaciones de vuelos.

BAA y British Airways se comprometen ahora a trabajar juntas en el diseño de un calendario que permita el traslado progresivo de los citados vuelos de largo recorrido.

Las previsiones decían que 120 de estos vuelos (60 despegues y 60 aterrizajes), que opera cada día desde la T4, fueran gestionados el próximo 30 de abril desde la T5.