El FMI alerta del riesgo de alta inflación por los precios de los alimentos
Entre el hielo y fuego. Con esas dos imágenes describió ayer el director gerente del FMI, Dominique Strauss-Kahn, la situación de la economía global actualmente. El hielo es la desaceleración económica global ligada a la crisis en EE UU y el fuego es 'la inflación que puede estar de vuelta reflejando factores estructurales y cíclicos como por ejemplo el desarrollo de los biocombustibles en los últimos años'.
El primer ejecutivo de esta institución internacional llevó ayer a la 'estanflación' al centro del actual escenario económico y por lo que se refería a los precios puso todo el énfasis en la fuerte subida de los alimentos 'que se han incrementado un 48% desde finales de 2006 hasta ahora', en parte por el desarrollo de este combustible alternativo.
Según el Informe de Perspectivas Económicas del FMI, el 45% de la subida de la inflación en 2007 en países emergentes e industrializados está provocado por la subida de los alimentos aunque el impacto ha sido y está siendo mayor entre los primeros. El informe señala, además, que la mitad del incremento de la producción agrícola entre 2006 y 2007 ha ido destinada a los biocombustibles.
Con respecto a estas subidas que ya están provocando crisis sociales en países como Haití y Egipto, el primer ministro británico, Gordon Brown, ha remitido una carta al presidente de turno del G8, el primer ministro japonés Yasuo Fukuda, para que se examine en la reunión, que tendrá lugar hoy en Washington, la relación entre la producción de estos combustibles alternativos y los alimentos. Strauss-Kahn aseguraba ayer en la rueda de prensa previa a la reunión del FMI este fin de semana, que la iniciativa de Brown 'es absolutamente necesaria'.
El presidente del Banco Mundial, Robert Zoellick, reforzó el discurso al señalar ayer que la comunidad internacional tiene que poner fin a esta espiral inflacionista que amenaza las políticas de desarrollo. 'Estimamos que el efecto de esta crisis alimentaria se puede traducir en siete años perdidos en términos de ayuda a la reducción de la pobreza'.
Un 'New Deal' alimentario
Zoellick va a plantear el establecimiento de un New Deal para los alimentos y planea una contribución de 500 millones de dólares al fondo de alimentos de la ONU para que se pueda dinamizar la asistencia a países necesitados y hacer de la agricultura una prioridad. Para ilustrar el drama que supone la subidas de los alimentos básicos, Zoellick apareció ante los periodistas con un paquete de arroz y un pan de payés (ver foto).
Por su parte, Strauss-Kahn, tras seis meses en el cargo, llega este fin de semana a su primera reunión donde presentará ante los representantes de los miembros de esta institución, el sombrío informe de perspectivas económicas y el primer paquete de reformas de esta institución que tendrá un nuevo sistema de cuotas y venderá parte de su oro para financiarse.
Strauss-Kahn descarta una 'falta de supervisión' del Fondo
El director gerente del FMI desestimó ayer cualquier crítica sobre una presunta incapacidad del FMI para anticipar la actual crisis financiera y económica y señaló que desde el año pasado se ha venido hablando de los riesgos de las hipotecas subprime o de alto riesgo. Strauss-Kahn también reveló que hasta hace unas semanas EE UU no ha permitido que se condujera el Programa de Seguimiento del Sector Financiero del FMI en sus fronteras.'No podemos ser responsable por la falta de supervisión donde ha empezado la crisis porque el principal instrumento para este tipo de supervisión del Fondo no podía ser usado en este país', dijo.