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Incidente

Las protestas pro-Tíbet logran apagar la llama olímpica en París

Pese a los miles de agentes dedicados a vigilar y asegurar el recorrido de la antorcha olímpica por París ante las protestas contra la represión china en Tíbet, el relevo de la llama por la capital francesa ha tenido que ser suspendido.

Ante la presencia de manifestantes por el recorrido del pebetero que debían realizar los relevistas, las autoridades francesas ha decidido apagar la llama y subirla a un autobús para que no sea objeto de sabotajes.

Nada más salir la antorcha de la torre Eiffel, en manos del ex atleta Stéphane Diagana, han comenzado los incidentes. Un edil de Los Verdes ha intentado arrebatársela y ha sido arrestado. Dos activistas se han intentado tender sobre la calzada al paso de la llama, otros dos militantes de Reporteros Sin Fronteras -que ya había anunciado actos de protesta, aunque prometía no interrumpir el relevo- han intentado saltar el cordón policía para llegar al relevista, cientos de manifestantes estaban apostados en el recorrido parisino y acosaban al portador de la llama con gritos de "Libertad en China y en Tíbet", mientras agitaban la bandera alternativa de RSF para los Juegos (los aros olímpicos hechos con esposas)...

De nada ha servido el espectacular dispositivo de seguridad montado en París tras los incidentes de ayer en Londres, cuando varios activistas lograron acercarse a la llama e intentaron apagarla con extintores. Para evitar altercados como éstos, 3.000 policías estaban dedicados a asegurar el recorrido, los 28 kilómetros que separan la torre Eiffel del estadio Charléty, incluyendo la brigada fluvial de la prefectura de Policía y la guardia republicana a caballo, así como un helicóptero.

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Ante los problemas que se estaban produciendo apenas iniciado el recorrido, sólo dos corredores habían portado la antorcha, las autoridades han decidido poner la llama a buen recaudo en un autobús e interrumpir el relevo cuando la antorcha iba a cruzar a la margen izquierda del Sena. Por motivos técnicos de seguridad, la llama ha tenido que ser apagada en el interior del autobús. Minutos después, se ha reanudado el relevo.

Problemas en Londres

El fuego olímpico, encendido el pasado 24 de marzo en Olimpia, llegó a París ayer, cerca de la medianoche, procedente de Londres. Allí, durante su recorrido, sufrió varios intentos de boicot. Primero, un activista intentó arrebatársela a la portadora, pero fue reducido por los numerosos policías que la acompañaban. Después, ya con otro corredor, otro activista intentó apagarla con un extintor y, aunque llegó a rociar a la comitiva, no logró su objetivo y fue arrestado.

Una especie de 'burbuja' de 200 metros de largo estaba igualmente desplegada para proteger a los 80 relevistas que tenían previsto pasear la llama por París, desde la torre Eiffel al estadio Chárléty tras haber pasado por los Campos Elíseos, la plaza de la Concordia y el Ayuntamiento.

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