Fuerte rebaja del precio que Telefónica cobra a sus competidores por el ADSL
La CMT ha cortado por lo sano las continuas críticas de Bruselas al alto precio del ADSL en España. Y lo ha hecho con una drástica rebaja, hasta del 86%, en la tarifa mayorista que cobra Telefónica a sus rivales, lo que anticipa recortes en los precios finales. Además, la operadora tendrá que devolver entre 20 y 25 millones a sus competidores, ya que la bajada es retroactiva.
Después de meses de acercamiento entre la Comisión del Mercado de las Telecomunicaciones (CMT) y Telefónica, el último consejo del regulador ha cambiado las tornas. Lejos de las buenas noticias que recibió el ex monopolio sobre la apertura de un fondo para financiar el servicio universal o la relajación de las obligaciones que tendrá frente a sus rivales en su nueva red de fibra, la resolución que la CMT transmitió el viernes a Telefónica habla de todo lo contrario. La operadora no sólo tendrá que rebajar de forma drástica el precio mayorista de su ADSL, el que cobra a sus rivales, sino que tendrá que compensar a sus competidores por haber inflado los precios durante 15 meses.
Esta decisión pone punto final al expediente abierto a finales de 2006, en el que la CMT ha revisado los precios que Telefónica ofrece en el llamado ADSL indirecto y ha concluido que están muy lejos de los costes a los que deben estar orientados por ley.
Por eso, después de adoptar una medida cautelar en diciembre de 2006 en la que ya rebajó las tarifas a Telefónica, ahora ha forzado un recorte mucho más drástico. Los precios tendrán que reducirse hasta un 86% en el caso más extremo, con bajadas que empiezan en el 6,5%, pero que superan los dos dígitos en la mayoría de los casos.
Las rebajas más elevadas se producen en las modalidades de más velocidad de acceso a internet -20 megas-, pero también son sustanciales en las más extendidas -uno y tres megas-. A ello se añade un paso de calado de la CMT para que la banda ancha se extienda en las mismas condiciones en toda España: la eliminación del ADSL rural. Esta modalidad permitía a Telefónica poner precios más altos en las zonas menos rentables, así que ahora la misma velocidad tendrá idéntico precio en todas partes, lo que supondrá rebajas que van del 50% hasta el 86%.
Pero la CMT no ha querido quedarse en una mera reducción de precios, sino que ha penalizado a Telefónica. Las tarifas más bajas tienen efecto retroactivo desde diciembre de 2006, lo que significa que el ex monopolio tendrá que pagar a sus rivales por haber estado cobrando durante 15 meses más de lo legalmente permitido. Fuentes conocedoras de la situación aseguran que la penalización estará entre los 20 y los 25 millones de euros y se fundamenta en que Telefónica tenía la obligación de orientar a costes sus tarifas, sin la necesidad de que nadie lo vigilara.
Una de las empresas más beneficiadas por esta decisión es Orange, que tiene entre sus filas al mayor número de clientes de acceso indirecto. También Tele2, Jazztel y muchas de las compañías más pequeñas que operan en regiones o nichos se verán gratificadas.
Telefónica estudia en estos momentos si recurre la decisión de la CMT, aunque se da por hecho que lo hará. Una de sus críticas es que el regulador haya tardado 15 meses en resolver el expediente, lo que ha disparado el coste de la retroactividad.
La rebaja del precio mayorista del ADSL es uno de los mecanismos que la CMT tiene en sus manos para intentar recortar el precio final que se cobra a los usuarios, ya que este tramo está liberalizado. Por eso, supone una reacción en toda regla contra las constantes críticas de la Comisión Europea sobre el alto precio del ADSL en España.
Pero para que los usuarios perciban una rebaja en sus facturas, las operadoras que ofrecen el ADSL indirecto tienen que repercutir los nuevos precios. Fuentes del sector apuestan a que esta vez sí se notará en los bolsillos, sobre todo porque el recorte es sustancial.
¿Un espejismo?
La CMT ha rebajado a precios muy competitivos velocidades elevadas de ADSL, pero para que sea posible que lleguen a los clientes las centrales y la red deben estar en condiciones. Por ahora, es imposible dar una oferta universal de 20 megas.
Un paso al frente para reducir la brecha digital
'Nada está de más, pero la CMT tiene que complementar este recorte con rebajas en los precios que cobra Telefónica por la conexión desde sus centrales'. Las palabras son de uno de los principales rivales en ADSL y muestra cómo se establecen las diferentes capas de competencia en banda ancha.La modalidad que la CMT rebajó el viernes es la más básica, la que implica poca inversión porque el que la compra se limita a replicar el servicio que le vende Telefónica. Hace dos o tres años su incidencia era mayor, pero ahora empresas como Orange, Jazztel o Tele2 han invertido en redes y se conectan desde las centrales de Telefónica para dar acceso directo -los famosos 20 megas-. En estos momentos, el ADSL indirecto da servicio a medio millón de clientes, de los 8,1 millones de usuarios de banda ancha que hay en España.Entonces, ¿por qué ha dado este paso la CMT? Porque el ADSL indirecto es el único que garantiza una oferta igual y homogénea para toda España -no está condicionado a que la zona sea rentable- y sirve de referencia para el resto de los precios.Pero, ¿por qué no se hizo antes? Porque la CMT ha querido incentivar la inversión. Ahora, en cambio, considera llegado el momento de fomentar los precios. Con esta rebaja, además, es posible que crezca el ADSL indirecto, sobre todo con la perspectiva de las nuevas redes de fibra.