La morosidad de los promotores con las cajas sube el 169% en doce meses
Datos preocupantes para la banca. La desaceleración inmobiliaria comienza a trasladarse a las entidades financieras. Los créditos a promotores se han estancando en los últimos trimestres, mientras que la morosidad en este sector ha subido. Durante el último año un 169% en las cajas y un 46% en los bancos.
Soplan vientos desfavorables para la banca española. A las turbulencias de los mercados financieros internacionales deben añadir los problemas endémicos que comienzan a afectar a la economía nacional. El más acuciante: la crisis del sector inmobiliarios.
La caída en la demanda de vivienda, unida a los problemas para encontrar financiación de las empresas promotoras, han provocado que muchas compañías hayan comenzado a retrasarse a la hora de devolver préstamos a las entidades bancarias.
Las cajas de ahorros son las que, hasta ahora, más se están viendo afectadas por la nueva epidemia. De acuerdo con los datos hechos públicos ayer por el Banco de España, la morosidad en los créditos concedidos por las cajas para actividades inmobiliarias se ha disparado un 169%, al pasar de 410 millones de euros a finales de 2006, hasta 1.103 millones 12 meses más tarde.
Bancos y cooperativas de crédito también acusan el mismo problema. En los primeros la morosidad de promotores ha subido un 46% (hasta 260 millones) y en las segundas un 77% (hasta 108 millones).
Sin embargo, las dificultades que han sacudido a inmobiliarias como Astroc, Llaneras, Colonial o Nozar, aún no representan un contratiempo muy serio para el conjunto de entidades financieras. Los 1.584 millones de créditos impagados por este tipo de empresas, tan sólo representan el 0,52% del volumen total de préstamos para actividades inmobiliarias. Esta tasa de morosidad es aún inferior a la de los préstamos para la compra de viviendas.
Desaceleración del negocio
El segundo aspecto preocupante en la financiación a promotores es su paulatina desaceleración. Después de una década creciendo a tasas superiores al 30% -llegando a crecer en 2005 a un trepidante ritmo del 55%-, estos créditos suben ahora menos de un 25%.
Los bancos han sido los que más se han distanciado de este tipo de inversión crediticia. El último dato de incremento interanual es del 16,6% en diciembre de 2007 (de 107.000 millones en 2006 a 125.000 millones), mientras que un año antes esa tasa era del 54,5%.
Cajas de ahorros y cooperativas de crédito, por el contrario, no se han desvinculado tanto del crédito al promotor y siguen presentando fuertes ritmos de crecimiento, del 30,7% y del 39,4% respectivamente.
Otro de los frentes abiertos para las entidades financieras es la subida global de la morosidad en sus carteras de préstamos. Las ratios de impago de créditos están situándose en niveles de hace siete años.
A niveles de 2000
También en este aspecto las cajas de ahorros están registrando un peor evolución que los bancos. De acuerdo con datos divulgados ayer por el Banco de España, la tasa de morosidad de los créditos concedidos por las entidades de ahorro a particulares y empresas subió en enero hasta el 1,03%, con lo que se coloca en el nivel más alto desde octubre de 2000, cuando se situó en el 1,08%.
Esta tasa es superior a la registrada por todo el sector financiero (bancos, cajas y cooperativas de crédito) en enero, que se colocó en el 0,965%, su séptima subida consecutiva, y se coloca en niveles de mayo de 2003.
De esta forma, la morosidad de las cajas de ahorro se situó en enero 0,141 puntos por encima de la tasa registrada el mes anterior, cuando fue del 0,889%, y es 0,353 puntos más alta que la alcanzada en el mismo mes de 2007, cuando fue del 0,677%.
Fuentes de las cajas indicaron que el repunte de la morosidad era algo 'previsible desde hace un año', por el incremento de los tipos de interés, y subrayaron que los incrementos que se están produciendo están en consonancia con los que afectan a otras economías de la zona euro que también sufren las subidas de tipos.
Además, destacaron que las entidades españolas tienen un amplio colchón frente a los impagos. La tasa de cobertura frente a futuros impagos alcanza el 212%, frente al 60% de media en la UE, por lo que esta situación 'no plantea ningún problema'.
El índice de morosidad de los bancos fue en enero del 0,857%. Un mes antes era del 0,761%.
La apertura de oficinas financieras bate su récord
El pasado ejercicio será recordado como uno de los peores del sistema financiero. La crisis de liquidez ha desembocado en un pozo al que aún no se encuentra el fondo, y cada vez son más las entidades internacionales afectadas. Pese a ello, gran parte de bancos y cajas españoles mantienen, de momento, sus planes estratégicos. Al cierre de 2007, de hecho, las entidades financieras volvieron a batir récord de apertura de oficinas en España y de contratación de personal, según datos del supervisor.Los españoles cuentan con 45.596 sucursales para realizar sus operaciones bancarias. Es decir, 1.808 más que un año antes, el número más alto de la historia de la banca. Esta cifra, no obstante, será difícil ya de superar puesto que a excepción de Caja Madrid y de La Caixa, las grandes y medianas entidades financieras han dado ya por finalizada su expansión nacional.Como ya es tradicional, las cajas son las instituciones que más han extendido su red. Cuentan con 24.591 sucursales, 1.173 más que doce meses antes. Los establecimientos de los bancos, mientras, suman ya 15.542 locales, 446 más que el año precedente. Fueron estos últimos grupos los que en 1999 -coincidiendo con las fusiones de los grandes-, iniciaron una política de cierres. En 2005 retomaron la apertura de sucursales, pero aún no han alcanzado el número que tenían hace ocho años, 16.905. Las cooperativas de crédito cuentan con 4.953 sucursales, 181 más que el ejercicio precedente. Destaca también la contratación de empleados en el sistema, 13.641, con lo que el personal que trabaja en entidades financieras se eleva a 277.323. De ellos, 117.570 desempeñan sus labores profesionales en los bancos -4.506 más que un año antes-, 131.933 en las cajas -7.794 más que en el ejercicio precedente-, y 20.429 en las cooperativas.