El anuncio de Porsche de ganar peso en Volkswagen marca el certamen

La noticia de la posible absorción de Volkswagen a cargo de Porsche estuvo ayer presente en el stand que el mayor fabricante de coches alemán se ha traído a la muestra ginebrina. El productor de bólidos anunció el lunes sus aspiraciones de comprar la mayoría accionarial de la multinacional de Wolfsburgo, para lo cual necesita un 20% adicional, tras el visto bueno del consejo de vigilancia. Porsche gastará entre 10.000 y 13.000 millones de euros en la operación.

El presidente del consejo de administración de VW, Martin Winterkorn, aseguró en la jornada previa al evento que la compañía no necesita la ley que protegía al grupo de opas hostiles, conocida como ley VW, y que ha sido demolida por el Tribunal de la UE. Winterkorn respondía así a la posibilidad de que el Gobierno alemán se lance a aprobar una nueva ley Volkswagen.

El sucesor de Winterkorn al frente de Audi, Rupert Stadler, afirmó ayer, por su parte, que la marca de los cuatro aros estudia diferentes escenarios para la producción en Estados Unidos, y no descarta la construcción de su propia factoría.

'Estudiamos opciones muy variadas, lo que puede traducirse en una colaboración con el grupo Volkswagen, pero la construcción de una planta de Audi totalmente independiente también es una posibilidad', indicó Stadler, en el marco del Salón Internacional del Automóvil de Ginebra. Audi pretende elevar significativamente sus ventas en el mercado estadounidense hasta alcanzar 200.000 unidades en 2015, fecha en la que su objetivo mundial de entregas se sitúa en 1,5 millones de unidades. El directivo explicó que Porsche también podría estar implicado en el proyecto para producir en Estados Unidos. 'Es una opción', dijo.