Orlando Rodríguez, premio Alfaguara
'Chiquita', la biografía ficticia de una liliputiense real en Cuba, se alza entre 511 manuscritos
La irónica y superadora existencia de Chiquita, una cabaretera cubana de principios de siglo, empecinada en encaramarse al triunfo a pesar de sus limitados 56 centímetros de estatura, se arrogó ayer el XI Premio Alfaguara de Novela. A su autor, el periodista y escritor cubano Orlando Rodríguez, poco prodigado en las librerías españolas, el éxito le despertó a las 6.10 de la mañana de Miami.
Creyó 'estar en un sueño'. Pero este escritor de 51 años, profuso autor de literatura infantil, confirmó tras el desvelo que el galardón era tan real como la biografía ficticia que le hizo merecedor del premio más difundido en lengua española al publicarse en 22 países. A pesar de su reticencia a concurrir a certámenes literarios, su Chiquita se creció entre los 511 manuscritos a concurso en la undécima edición del Alfaguara. Entre el medio millar de textos inéditos que competían por los 118.700 euros del premio, 120 procedían de España y 102 de México y el resto de otros puntos de Latinoamérica, como la isla natal del el autor, de la que se exilió hace 19 años.
En esa Cuba arranca Chiquita. Rodríguez la conoció por correo electrónico. 'Por el de una amiga que traía adjunta una fotografía de esta pequeña mujer', relató en videoconferencia desde Florida.
Al dejarse sucumbir por su historia, Rodríguez se propuso construir una novela de aventuras. 'Con la consigna de hacerla descansar sobre un trasfondo histórico', aclaró. Chiquita fue real. Espiridiona Cenda, bailarina y cantante de variedades de principios del siglo XX, salió de su Cuba natal -al igual que Rodríguez- 'para liberarse del opresivo mundo freak de los disminuidos en estatura', agregó el autor. Y es que el texto de Rodríguez realiza un recorrido por la historia cubana desde su primera guerra de independencia.
El autor, que reconoció 'haber sufrido muchísimo' en los cinco años que trabajó en la novela, no cejó en halagos a su diminuta protagonista. De ella dijo que fue 'una persona inteligente, voluntariosa y pasional que se propuso triunfar en la vida pese su limitada estatura'. Una historia contada desde la perspectiva de alguien que mide 56 centímetros, pero descrita en multitud de páginas, avanzó el escritor nicaragüense Sergio Ramírez, presidente del jurado. Una historia, como destacó su narrador, que engarza con la actualidad, porque el Estados Unidos que recibió a Chiquita -imbuido en una lucha electoral entre demócratas y republicanos- y la Cuba que ella abandonó-escapando del colonialismo- tienen en su espejo el momento actual de ambos países vecinos de ese otro lado del Atlántico.