IKB solicita una inyección de 2.000 millones
El Banco de Industria Alemán (IKB) ha reconocido haber realizado inversiones en bonos ligados a subprime por valor de 11.500 millones de euros. Ante esta situación, el banco alemán ha solicitado una nueva inyección de capital, la tercera desde que estallara la crisis, de 2.000 millones de euros, lo que ha provocado el desplome bursátil de la acción. Los títulos cedieron ayer un 20,3% hasta los 4,94 euros.
IKB calcula que durante el pasado ejercicio y los primeros meses de 2008, la pérdida neta para el banco podría ascender a 700 millones de euros. Su principal accionista, el Banco de Crédito para la Reconstrucción (KfW), de titularidad pública, podría estar estudiando la venta de la participación, que alcanza el 38%, después de que el pasado mes de septiembre acudiera a rescatar a IKB y no se resolvieran los problemas.
En ése momento, y junto con otras entidades privadas, KfW inyectó 3.500 millones de euros en el banco de financiación de medianas empresas para cubrir sus primeras pérdidas. Posteriormente, realizó nuevas inyecciones de capital hasta alcanzar los 6.000 millones de euros.
De esta cantidad, KfW, ha aportado la mayor parte de esta cantidad, casi 5.000 millones de euros, pero algunos analistas recomiendan parar el drenaje, lo que habría provocado el desplome de los títulos en la Bolsa de Fráncfort.
Según el economista Martin Faust, citado por la agencia alemana Dpa, todos los grupos bancarios están interesados en que IKB no se declare insolvente porque ello afectaría a la confianza en el sector. 'Al final será el Estado el que tendrá que pagar y, por ende, los que pagan impuestos', indicó Faust.
Consejo
El próximo miércoles se reunirá en Berlín el consejo de administración del banco público KfW, propietario del 38% de IKB, con el ministro alemán de Economía, Michael Glos. El objetivo de la reunión es encontrar una solución rápida a la crisis.