La nueva Metrovacesa

Cuando aún no ha concluido la segregación de los activos de Metrovacesa y la francesa Gecina, los gestores de la primera ya han planteado un programa estratégico (Plan Fénix), que pretende transformar radicalmente la compañía. Estima que el 90% de la actividad debe centrarse en el negocio patrimonialista, el menos expuesto a los rigores del ciclo, y limitar al mínimo la actividad promotora. Además, pretende que casi la mitad de su negocio esté fuera de España, para lo que no dudará en estudiar incluso una fusión siempre que Metrovacesa mantenga la gestión. Pero incluso invita a que nuevos socios con activos inmobiliarios de calidad se incorporen al accionariado. Los planes de la inmobiliaria, con nuevas inversiones y endeudamiento récord, son una renovada apuesta por un sector muy castigado por la crisis, al que el sistema financiero había retirado casi toda línea de crédito, y que precisa de nuevos impulsos de confianza y autoestima.