Francia investiga a Société Générale por una presunta red de blanqueo de dinero ruso
La dirección especializada en la lucha contra el fraude de Société Générale ha comunicado al Ministerio de Economía la existencia de una presunta red de blanqueo de dinero desde hace al menos dos años, un asunto que no tiene nada que ver con el fraude del broker Jerme Kerviel.
Según una información publicada por 'Le Parisien', Société Générale alertó la semana pasada a la célula de lucha contra el blanqueo de capitales (Tracfin) del Ministerio de Economía, que habría puesto en marcha una investigación sobre el origen de gigantescas sumas de dinero invertidas en proyectos inmobiliarios en la región parisina.
"Se refiere a decenas o centenas de millones de euros que duermen en cuentas de la Société Générale cuya procedencia es dudosa", relata al diario una fuente próxima al caso. Según 'Le Parisien', hace más de un año, los servicios antifraude de SocGen detectaron unas transacciones anormales efectuadas por clientes extranjeros y, al hilo de su investigación, lograron vincularlas con al menos otras 800 cuentas de agencias de París y la Isla de Francia (la región parisina) que también presentaban graves anomalías.
Los titulares de estas cuentas son en la mayoría de los casos testaferros o sociedades civiles inmobiliarias ficticias o con domicilios sociales desviados. Tras estas cáscaras vacías aparecieron varias veces un grupo de inversores dirigido por dos hermanos rusos residentes en Londres que hicieron fortuna en Rusia con el comercio de aluminio y que niegan siempre su relación con medios mafiosos.
Gracias a un extravagante montaje financiero, los fondos habrían viajado a través de sociedades implantadas en paraísos fiscales y luego habrían sido invertidos en importantes proyectos inmobiliarios por valor de decenas de millones de euros en el barrio de La Defénse de París, en París capital y en la región parisina.
Según el sitio web Backchich, que ha revelado el asunto, la Dirección general de Impuestos investiga, por su parte, supuestas disfunciones desde 2006 tras un registro llevado a cabo en una empresa que poseía cuenta en SocGen.
Tracfin deberá en las próximas semanas verificar estas sospechas de blanqueo y garantizar que el banco se somete a las obligaciones de control relativas a los titulares de estas cuentas. Una vez que se hayan examinado las distintas fases de alerta, el Tribunal de París podría tomar cartas en el asunto.
Desde hace varios años, los servicios franceses de inteligencia han puesto de relieve las crecientes inversiones de nuevos oligarcas rusos en París y la costa Azul francesa.