La Agencia Tributaria centrará sus inspecciones en el sector inmobiliario
Según las directrices generales del Plan de Control Tributario para 2008, la AEAT llevará a cabo medidas de control en todo el proceso urbanístico, desde la promoción inmobiliaria, la compra-venta de alquileres y las actividades de los no residentes.
Según el Ministerio de Economía, este control se beneficiará de la nueva información que supone la incorporación del número de referencia catastral de los inmuebles en los contratos de suministro.
La AEAT también mantendrá este año las medidas de control tributario de las operaciones en las que se han utilizado billetes de 500 euros, con la actuación de la inspección en aquellos casos donde pudiera existir delito fiscal.
Otra área prioritaria de la Agencia Tributaria será la detección de tramas de fraude en el IVA, la utilización de facturas falsas y el control de las solicitudes de devolución, especialmente de contribuyentes relacionados con tramas de fraude.
En cuanto al control de aduanas, el Ministerio de Economía destaca el desarrollo de la figura del Operador Económico Autorizado y subraya el esfuerzo que seguirá la AEAT en las áreas tecnológica, de gestión y aduanera.
Así, en la tecnológica se utilizarán escáneres para el control intrusivo de mercancías o las nuevas patrulleras de vigilancia aduanera; en la de gestión habrá una mayor demanda de información y nuevos procesos, y en el ámbito jurídico se crearán nuevas formas de relación con las empresas.
Paraísos fiscales
En este sentido, el Operador Económico autorizado, cuya solicitud puede hacerse desde el 1 de enero de este año y está avalado por una directiva europea, permitirá a los importadores y exportadores que justifiquen un nivel adecuado de fiabilidad en sus actividades comerciales y tributarias que se beneficien de una relación más directa en sus trámites aduaneros.
Para intensificar la lucha contra el fraude fiscal y el blanqueo de capitales, la AEAT desarrollará y consolidará este año las treinta unidades de investigación creadas el año pasado, que se unieron a las once ya existentes.
Dichas unidades centrarán sus esfuerzos en identificar las formas más graves de fraude, especialmente la utilización de paraísos fiscales.